Corriendo por sensaciones y carrera en la playa de Rota

Primera semana de vacaciones y seguimos corriendo. Ya sabía yo que iba a ser difícil parar cuando se dispone de más tiempo y de más oportunidades para correr por lugares que el resto del año no se puede. Madrugar para correr, por mucho que algunos nos miren como si fuéramos locos, es un gustazo en verano.

En Valdelagrana, con un paraje como Los Toruños (no me cansaré de repetirlo y prometo que no trabajo allí) aún se disfruta más. Eso sí, como te coja una levantera como la de la semana pasada el "contacto con la naturaleza" es un poco durillo. Entonces se echa algo de menos el recorrido urbano resguardado por las calles, y es que el viento te movía de un lado a otro del carril como si fueras un muñequito (como el conejito de duracell, por ejemplo).

Lo cierto es que estoy saliendo muy tempranito, amaneciendo, sin ponerme ritmos, a correr sin más. Al final salen los tiempos de siempre, por qué negarlo, pero sin presión. En esta semana han sido tres salidas de 10,5 kms con dos de ellas muy duras por el viento que he comentado antes. Fueron el martes, miércoles y el viernes. Los ritmos: 5:08, 5:09 y 4:58.

El domingo me había inscrito en otra carrera de verano, de las que llamo estresantes, con 8 kms en la playa de Rota. Llegué con el tiempo justo, ya que encontrar aparcamiento fue bastante complicado, y encima con sorpresita final...

Tras encontrarme con la gente de mi club, Alfonso y su padre (como siempre, al pie del cañón) y con Gustavo y un amigo, recogí el dorsal y allí saludé a Miguel Ángel del Fronter y a otros conocidos. Después por fin conocí a José Prieto (Joprivi) y charlé un rato con David Matraca, Antonio Martín-Bejarano y con Charlie Triatleta sin fronteras. Un placer poder saludar en persona a tantos conocidos a través del blog.

La carrera estaba marcada por la reivindicación de los trabajadores de Visteon a los que les han jugado una mala pasada cerrando la empresa para irse a China con mano de obra más barata. Quizás la empresa tenga derecho a buscar beneficios, pero las autoridades deben proteger a los trabajadores y exigir a estas multinacionales que en los momentos duros también ellos acerquen el hombro, y no sólo recibir ayudas y subvenciones. En fin, la cosa está tremenda, ya lo sabemos...

Tras un pequeño calentamiento con Alfonso, planeando nuestro futuro como pre-maratonianos, tomamos la salida. Las condiciones no eran las ideales para desmadrarse mucho, ya que había un desnivel producido por la marea que dificultaba correr, el terreno estaba bastante blando por algunas zonas, había algas y alguna que otra piedra. Bueno, una carrera por la playa incluye todo esto, pero hay que contarlo, ya que es más un cross que otra cosa. Para colmo, la humedad endurecía aún más la prueba.

Mi idea era seguir con el "anti-plan" de vacaciones...carrera por sensaciones. Así se lo dije a Alfonso, que no contara con mi compañía mucho tiempo, y así fue. Los dos primeros kms los hicimos juntos a 4:20 y a partir de ahí decidí bajar un poco el pistón y no sufrir demasiado. Pues lo bajé, pero no dejé de sufrir, y me mantuve en torno al 4:25 en una carrera en solitario que me hizo alargar más la dureza del recorrido. Al final apreté un poco y pillé a los dos corredores que siempre llevé delante y que no creí poder alcanzar por lo que fue "mi pequeña victoria personal" con un ritmo medio final de 4:25...y el corazón asomando por la boca.

Después de descansar charlando con los amigos de antes vino lo mejor del día, el baño en la playa. Después, lo peor, encontrarme una multa como sorpresita por aparcar en zona de ORA (un domingo???)...40 euritos del ala si la pago prontito y sin protestar. Estamos en vacaciones, así que mejor olvidarlo....grrrrr

Por otro lado, he aclarado bastante mi futuro y los retos para los próximos meses. El parón o descanso total lo dejo para un tema de salud que intentaré hacer en septiembre/octubre y que me obligará a estar parado una semana mínimo. Así que me he inscrito en otra popular por la playa (creo que la última), el 28 en Sanlúcar, para la que no haré preparación especial, sino que seguiré con el "anti-plan por sensaciones".

Aunque tenía muchas ganas de hacer el Desafío Doñana por relevos haciendo yo la carrera a pie, de 30 kms por las playas del Coto, no he conseguido encontrar a un nadador que acepte hacer los 2,8 kms para cruzar el Guadalquivir, así que me quedaré con las ganas. Tampoco voy a hacer el trail Turdetania, ya que considero mucha tela meterme casi 60 kms (aunque no sean a gran ritmo) en los días previos al inicio del plan de preparación para el reto del año: la maratón de Sevilla. Ese será el que marcará mi futuro en los próximos cinco meses y sobre el que girará todo lo que corra, tanto entrenos como carreras (medias de Los Palacios, Écija, la Cartuja, etc.).

Para ir calentando, sin idea de ir a desfondarme, también me he inscrito a la media maratón de Marbella el próximo 25 de septiembre con otros compañeros del club, así que ésta será "la vuelta al cole".