domingo, 25 de septiembre de 2011

XXVI Media Maratón de Marbella

A las cinco de esta mañana sonaba el despertador. Había que estar loco pero algunos nos levantamos un domingo antes que para ir a trabajar, hacernos 200 kms en coche y correr 21. Y encima pagando. Menos mal que los que leen esto están igual de...bueno, locos. Ducha rapidita, más que nada para despertarme de las pocas pero felices horas de sueño: 5. Exactamente las mismas que los golitos que el Barça metió ayer. Así da gusto.

Después un desayuno nuevo pre-carrera. Hoy probaba el pastel de carbohidratos que me recomendó Abuelo runner y que también toma el bueno de Isidro para su "pre . 8". Al fin lo encontré en el Decathlon de El Puerto y me puse manos a la obra. No es que se trate de hacer una tarta de 3 chocolates de la Thermo Mix, pero reconozco que con el primer sobre la cagué...me equivoqué en los ml de agua (eché 600 en lugar de 60) y me salió un batido de chocolate calentito. Al fregadero y a por el segundo...éste ya bien y me lo zampé aunque me costó un poco, porque sale un trozo bastante grande.

Después de "hacer los deberes" recogí a Álvaro, otro compañero y buen runero-bloguero, y mientras algunos y algunas con pocos papeles todavía hacían planes para seguir de fiesta nosotros tirábamos para Marbella a las 6 de la mañana.

La semana para mí no había comenzado bien. El lunes me volví a dar un masaje de descarga con el sóleo izquierdo (también el derecho) muy tocado. El fisio hizo un buen trabajo y dos días de descanso me vinieron de perlas. Pero el martes, mientras me reponía muscularmente, mi maltrecha nariz (por poco tiempo...) volvió a ser visitada por  mr. resfriado y sus amigos los moquitos. Éramos pocos...

Así he estado toda la semana, más preocupado de la parte superior de mi cuerpo que de las piernas, la verdad. Será por eso que en las dos salidas que hice, miércoles y viernes, me encontré muy bien muscularmnete sin apenas molestias en los sóleos ni gemelos. Ahora, mocos eché hasta por las orejas, aunque creo que me vinieron bien las dos sudadas.

De esto y otras muchas cosas estuvimos hablando Álvaro y yo durante el viaje a Marbella cuando sin darnos cuenta ya estábamos allí. Eran las 8 de la mañana. Nos acercamos a retirar los chips y dorsales y luego a tomarnos un café y un zumo, cosa que nos costó bastante porque parece que en Marbella los bares no madrugan. Al poco nos encontramos con Falín y David Parada, charlamos un rato, nos preparamos y a eso de las 9.30 estiramos y calentamos un poco.

La carrera salió puntual a las 10. Éramos 1.000 corredores y había buen ambiente. El recorrido, con partes de asfalto y carril compacto en general era bastante plana y bordeaba el mar en un ida y vuelta desde el paseo marítimo de Marbella. Hacía calor y mucha humedad, lo cual endurecía algo la carrera.

Con Álvaro, Falín y David antes de salir

En la salida nos quedamos bastante atrás los 4, llevando un ritmo lento  de 5:15 a pesar de zigzaguear para intentar ganar puestos. Una vez cogida la posición Álvaro tira para delante, ya que quería hacer marca personal, y yo me quedo con Falín y David. El ritmo es más alto del que tenía pensado pero no me encuentro mal. Los primeros kms rodé en torno a 4:30 / 4:40, así hasta llegar al 9 que decido bajar el pistón.

El resfriado, que hasta ahora no me había afectado demasiado, empieza a hacer efecto en forma de "moco duro". Escatológico pero necesario llamarlo así, ya que no había forma de hacerlos salir de mi nariz. Por mucho que soplaba (donde podía, porque en plena carrera sacar un pañuelo es un poco complicado) no había forma de hacerlos salir, y los que asomaban tenía que quitármelos como podía. Muy desagradable...mejor no sigo. Espero que no me hayan echo ninguna fotito en pleno recorrido porque puedo parecer el Sr Barragán...

Esto hizo que mi respiración se viera afectada dejando de entrar aire por el poco hueco que tengo en mis orificios nasales y complicando mucho mi carrera. De piernas sin embargo no iba mal del todo, la verdad. En esto que alcanzo a David, ya que Falín siguió solo para delante, y recupero algo el ritmo ayudado por un gel que me tomo en el 10. Vuelvo a los 4:40 pero ya con dificultades. Él tampoco va bien y de aquí al final, sobre todo a partir del 15 toca sufrir. Cada uno de lo suyo. Él muy cansado de piernas y yo con "sobrecarga nasal".

Juntos nos animamos y aunque los 3 últimos kms superamos los 5´ de media llegamos a meta en 1:42 minutos, que como digo en un resultado decente. La media de 4:51 es justa con lo que hemos hecho: de más a menos. No es lo que uno desea pero a veces los acontecimientos superan a lo esperado. Una experiencia más y más kms en unas piernas que al menos no han acabado cargadas.

En la legada nos encontramos con Falín y Álvaro, que lograron un buen tiempo de 1:37, nos tomamos el agüita de rigor y con nuestra camiseta de recuerdo, tras una buena ducha en el hotel de Falín (bueno, la habitación en la que estaba) caminito de Jerez. Otras dos horitas de coche, más conversación con el bueno de Álvaro y sus planes maratonianos de Valencia y a las 3 en casa.

Ahora toca cambio de planes. Esta semana tengo una prueba de esfuerzo mañana lunes y el viernes la nocturna de Sevilla, pero será uno más de los rodajes "no quality" que haré, porque después tendré que estar unos 10 días parado por un tema de salud que os contaré y que me vendrán muy bien para descansar un poco.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Aflojando

El verano ha sido intenso y el cuerpo tiene aguante hasta que dice basta. Las salidas estivales fueron por carriles, playa y terreno "no duro". Es lo que achaco a que cuando he vuelto a correr por mis zonas habituales de asfalto han empezado las molestias musculares.

La semana pasada ya estaba tocado del gemelo izquierdo, es más, necesité de un masaje urgente porque el tendón estaba resintiéndose también. El fisio me avisó que de seguir con esa "tensión" gemelar podría haber acabado con una tendinitis.

Mejoré bastante, descansé algo y me fui a la sierra a hacer la Pitu-Trail, como sabéis. Correr una prueba en la montaña y no acabar tocado de los gemelos es difícil, por lo que el domingo casi no podía apoyar la pierna izquierda. La sobrecarga era bestial.
Otro con sobrecarga...
De todas formas el lunes salí a intentar hacer un rodaje de recuperación que se convirtió en un" trote de martirización". A pesar del dolor general por cansancio en los cuádriceps (efecto directo de la Pitu-Trail) y de la sobrecarga del sóleo y el gemelo izquierdo hice 10 kms a 5:26, pero entrando en casa cojeando.

Me tomé otro descanso de un par de días y mejoré levemente. El jueves volvía a la carga y aunque al principio el dolor del sóleo apareció, cuando calenté se hizo "soportable" y completé otros 10 kms a 5:04.Pero el final otra vez se hizo duro y acabé cojeando.

Viernes y sábado descanso total otra vez, y aunque no debería, esta mañana quedé con "Killian Falín" para hacer una tirada larga y algo de desnivel. Me encontraba bien y apenas me dolía el dichoso sóleo, pero otra vez al empezar me molestó algo. Seguí casi sin pensar en él y fueron pasando los kms hasta completar 18,5 a un ritmo de 5:11. Buen rodaje por la campiña jerezana en un recorrido que no conocía, empezando en Sherry Golf, carriles hacia la carretera de Sanlúcar hasta llegar a Ikea y vuelta por asfalto hasta la salida.

Para ir con el sóleo en esas condiciones no he terminado mal del todo, y después de darme con Traumeel, al menos no cojeo. Por eso el título de la entrada, ha habido que aflojar la máquina antes de lesionarme de verdad. Mañana tengo otra sesión de masaje y esta semana volveré a salir tres días, no más, y a ritmos fáciles.

Como próximos retos tengo el domingo que viene la media de Marbella, que dada la situación no voy a reventar y correré según me vea y respondan las piernas. El viernes siguiente me he inscrito a la nocturna de Sevilla, que es una carrera para disfrutar con los amigos, con miles de inscritos. Una fiesta running, según me han dicho. Y ese mismo domingo hay una popular en Rota a la que me gustaría ir con mis enanos, ya que hay categorías de peques, aunque creo que será mucha tela y la dejo en el aire.

Después tengo previsto un pequeño paréntesis debido a un tema de salud en el que espero aprovechar para descansar una semanita, empezar mi plan de maratón del que hablaré dentro de poco (estoy esperando contestación de la "academia de Jack Daniels") intercalando alguna que otra carrera. Una de ellas será la Inferno Trail en su modalidad de media milla vertical de 19 kms. Promete ser divertida y dura pero supongo que me vendrá bien de cara al maratón.

Espero que todo se cumpla, pero antes debo recuperarme del todo.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Pitufando en la I Pitu-Trail Nocturna

Carrera singular a la que me apunté la semana pasada. Se trataba de un trail nocturno, cosa que nunca había hecho, y partía de Júzcar, pueblo al que la Sony, productora de la película Los Pitufos, había seleccionado para promocionarla.

El resultado es que todo el pueblo (hay alguna excepción, todo hay que decirlo) está pintado de azul y sus habitantes están implicados con el tema claramente. Muchos van de azul y algunos disfrazados de Papá pitufo, Pitufo simpático, Gárgamel y hasta alguna Pitufina.

Según nos contaron en el pueblo, no fue demasiado fácil transformarlo al azul pitufo al estar denominado como pueblo blanco, pero lo cierto es que este pequeño pueblo de 221 habitantes recibe 800 visitantes diarios los fines de semana, con lo que esto supone sólo en ventas de camisetas y otros recuerdos. Al parecer este mes tienen una asamblea para decidir si lo dejan pintado de azul más tiempo.

No pude resisitirme a la Pitufina
El pueblo en sí no tiene nada del otro mundo, y el mercado pitufo no ofrece ninguna rareza o producto extraordinario, para qué nos vamos a engañar, pero no deja de ser algo curioso. No recomiendo a nadie que se meta 250 kilómetros para visitarlo, pero si os coge de paso sí merece la pena verlo. Su gente además es muy hospitalaria y el entorno es precioso, en medio del Valle del Genal.

Después de esta "breve" introducción, la carrera. Lo primero el viaje, y es que salimos de Jerez en la super-furgo de Sergio con su cuñado Falín a las 4 de la tarde. Después de un viajecito de 2 horas y media que se nos hizo bastante corto llegamos al pueblo. Aparcamos en la carretera, ya que sus calles no daban para todos los coches que allí había y dimos una vuelta para conocer un poco el pitu-pueblo. Visitamos el pitu-mecado y recogimos los dorsales, nos cambiamos y con más de una hora de antelación ya estábamos listos.

Preparado para salir con Sergio y Falín
Después de un pequeño briefing por parte del organizador de la prueba se dio la salida sobre las 20:15. El recorrido era de 14 kms con 600 metros de desnivel positivo y 1.100 acumulado. Se trataba de dos circuitos muy diferenciados. Primero se subía a la montaña por encima del pueblo y se bajaba de nuevo para pasar por el mismo para comenzar la segunda parte, en la que se bajaba hasta un río, se atravesaba y se subía por un sendero con mucha vegetación de nuevo hasta el pueblo. Ambos circuitos me parecieron duros.

En la salida Falín se despega con un ritmo fuerte y yo me mantengo controlando en lo que puedo las pulsaciones. Sergio se queda un poco atrás ya que no comenzó muy bien. La verdad es que desde el primer km teníamos que intercalar los "momentos running" con andar, ya que el desnivel era muy fuerte. Con Falín por delante me quedo en un grupo en la montaña del que no me separo. Al final nos quedamos 3 y ya en la cima me pongo delante dejándolos en la bajada, ya que apreté bastante con los frontales encendidos. En las subidas sin embargo no iba cómodo, ya que no estoy acostumbrado a esas pendientes y no me arriesgaba a subir mucho el ritmo ante el miedo a la pájara. Tendré que entrenar más cuestas.

La llegada al pueblo la hago en un grupo de 4 a los que pillé en la bajada. Seguimos bajando en dirección al río, pero en un repecho pierdo un poco de distancia con el grupito y decido aguantar porque sabía lo que me quedaba y estaba algo tocado del gemelo. En esto que alcanzo a un corredor pitufo que con poca luz y parecidas fuerzas había bajado también el ritmo. Con él llego al río, lo cruzo y tras una parte semi plana por una pista de tierra comenzamos la subida y la parte aventurera de la carrera.

Nos pilla parte del grupo que dejé en la bajada de la primera parte y seguimos juntos. Aquí ya es imposible correr salvo pequeños tramos, el sendero sólo da para una persona y todo está lleno de ramas, raíces y zarzas. Además, la oscuridad es total porque el bosque impide que la preciosa luna llena nos llegue mínimamente, así que dependemos de nuestros frontales y de las pisadas de nuestras ya cansadas piernas. Más de un tropezón pequé, aunque ninguno para ir a al suelo..por poco. Una de las partes más chulas fue al atravesar el río de nuevo, pero por una parte más profunda que antes, con el agua casi a la rodilla.

A falta de un par de kms (creo, porque aquí se me fue el gps que perdió la señal y no tengo más datos) me alcanzó Sergio que iba como un tiro en la subida. Intenté seguirlo pero me quedé detrás del grupo y sin tiempo de reacción lo perdí en la oscuridad. Tampoco quería arriesgar sin saber cuánto duraba la subida, ya que iba muy justo y el gemelo "quería llegar por su cuenta a la rodilla".

El resto fue más subida. Nos quedamos tres corredores y con cierta tranquilidad finalicé decentemente en el puesto 18 con un tiempo de 1:44:18 en una preciosa y dura carrera que me ha enganchado aun más en esto de la montaña. Sergio quedó el 14 pero hay que destacar la carrera de Falín, que quedó noveno y tercero de la categoría de veteranos, recibiendo su correspondiente pitu-trofeo. Y eso que se perdió durante un par de minutos. Lo tendremos que llamar el Killian del DBM, porque sube de lujo.

También hay que destacar la buena organización de una prueba que al ser nocturna es más complicada de balizar, y que entre los participantes hubo un perro (nos dijo el que / al que lo guiaba que ya había hecho hasta los 101 de Ronda...) y una familia con sus dos hijos de pequeña edad que la recorrieron juntos.

Objetivo cumplido
Después nos pegamos una duchita fresquita y cambio de ropa, recogemos un bocata y una cervecita y asistimos a la entrega de trofeos.  La vuelta a casa, lo más duro de la carrera, ya que lo que realmente tuvo mérito fue meterse otras 2 horas y media de carretera a las 12 de la noche, aunque la experiencia mereció la pena. Después de ésta, todo apunta a que correré la Inferno Trail en noviembre. Pero antes, habrá que meterse cuestecillas...

viernes, 9 de septiembre de 2011

Adiós a las vacaciones, a los Toruños y al Desafío..y ahora a pitufar

Diez días sin publicar una entrada son muchos días, pero llegar a casa tras un mes fuera y recomponer todo unido a los enanos de vacaciones ha hecho que esté tan liado que no haya podido sentarme a escribir. Eso sí, correr he corrido, y mucho. Ah, y también he leído algo de mis colegas blogueros, aunque no les haya podido responder a todos como se merecen. Espero que a partir de ahora todo se normalice un poco.

Se acabaron mis vacaciones, como a todo el mundo. Sin traumas, sin depresión, vuelta al trabajo, y a empezar a pensar en el invierno y en los entrenos "de verdad" para afrontar los auténticos retos que tengo por delante.

Con el fin de las vacaciones volví a casa dejando uno de mis lugares de entreno favoritos, Los Toruños, donde este verano me he hartado de rodar por todos sus caminos y en todas sus direcciones. Por los carriles, por los pinares, por su puente y por la playa. Un lujo tenerlo tan cerca, por lo que este año me he prometido hacer muchos de mis rodajes de fin de semana por allí. Supongo que algún responsable de Los Toruños que me lea tendrá que hacerme una esponsorización por la propaganda que les estoy haciendo..jeje. Dejo alguna foto de mis muchas salidas por allí:

Con Valdelagrana al fondo
Dan ganas de correr, ¿no?
Amaneciendo es de lo mejor

En cuanto al Desafío Doñana, también le tuve que decir adiós. A pesar de que Charlie me consiguió un nadador no pude encontrar a alguien para pedalear los 170 kms del relevo ciclista. A decir verdad, me estuve preparando (sobre todo mentalmente) para la carrera a pie, que es de 30 kms, hasta hace pocos días. Tenía varios contactos y con bastantes posibilidades de lograr el ciclista, pero por uno u otro motivo todos fueron fallando. A última hora surgió la posibilidad de completar un equipo de Rota al que le había fallado precisamente el corredor, cuando ya había descartado participar (me había incluso inscrito en la que corro esta semana), pero tras pensarlo y absorbido por la ilusión les dije que si no encontraban otro me apuntaba. Al final lo encontraron, así que el año que viene intentaré hacerlo organizándolo con tiempo. No quiero dejar pasar la ocasión para agradecer al bueno de Charlie su interés para que participara en la prueba, y estoy seguro que si no lo hubiera descartado hace una semana me habría encontrado el ciclista. Gracias, amigo.

Por otro lado, desde la entrada anterior he seguido corriendo casi sin descanso, como siempre, lo que me ha llevado a una fuerte sobrecarga en los gemelos, sobre todo el izquierdo. Ayer me dieron un masaje de descarga (a la desesperada) y el fisio me dijo que con la tensión que llevaba me estaba empezando a afectar al tendón. Procuraré visitarlo con más frecuencia, y no esperar al último momento. Lo cierto es que el masaje me dejó tocado, sufrí más de lo normal y sigo con dolores, aunque el gemelo está mucho mejor.

Los entrenos (no me extenderé, lo prometo) de estos días han sido:

  • Lunes 29/08: rodaje de recuperación cochineril tras la carrera de la playa de Sanlúcar. 11,7 kms por los Toruños volviendo por la playa a 5:15.
  • Miércoles 31/08: pequeña prueba de entreno a lo Jack Daniels (en próximas entradas contaré que he hecho la solicitud de inscripción en su escuela de entrenamiento, aunque guiado por uno de sus más ilustres alumnos...). Rodaje con cambios de ritmo por Los Toruños en cuatro series de 1km a ritmo T (umbral) y otro a ritmo E (easy). Lo pasé muy bien y acabé con la sensación de que me faltó distancia. Casi 11 kms a 4:53 de media. Muy buenas sensaciones..espero que me admitan en la escuela JD para entrenar mi maratón.
  • Sábado 3/09: despedida de Valdelagrana y Los Toruños. Aproveché para organizar (casi de casualidad) una pequeña quedada a la que vinieron Charlie, David Matraca, Currito (en bici) y Álvaro. Hicimos una tirada larga tempranito dirección a Puerto Real con casi 18 kms a 5:18. Otro buen rato con unos amigos de los que siempre se aprende algo y con los que compartir retos y sueños futuros. Espero que sigamos repitiendo en alguna otra salida.
Buena compañía para una tirada mañanera

En pleno puente de Los Toruños con Charlie y Álvaro
  • Lunes 5/09: ya en Jerez, con las piernas algo cargadas hice una tirada suave (porque no podía ir a más) de 7,50 kms. La vuelta al asfalto no podía llegar en peor momento. El tendón de la pierna izquierda me empezó a dar pequeños tirones.. Cita con el fisio urgente el miércoles.
  • Martes 6/09: no estaba en mis planes, pero los compis con los que corro la prueba del fin de semana (ahora cuento...) me llaman para entrenarla...como decir que no... Me pongo Traumeel a tope y las medias de compresión y a rodar. Impresionante y espectacular rodaje nocturno con frontales por la Sierra San Cristóbal con contínuos toboganes en un paraje bestial y algo tenebroso de noche. Menos mal que éramos tres, pero en algún momento tuvimos que "cambiar de ritmo" al escuchar demasiado cerca los ladridos de los miles de perros que había por el campo... 18 kms en casi dos horas a 6:02 de media y un desnivel acumulado positivo de 600 metros. Con la emoción y las cuestecitas las piernas se calentaron y gracias también al camino de tierra y a las Compressport no tuve demasiadas molestias. Eso sí, cuando llegué a casa a las 23:30 con mi mujer a punto de llamar a la policía casi no podía ni subir las escaleras. Al día siguiente vino el masaje que ya conté...
  • Jueves 8/09: aprovechando una visita a casa de mis padres en Valdelagrana he hecho un rodaje suave por....sí, Los Toruños! Estaba muy pesado al principio y poco a poco he ido recobrando las sensaciones, aunque terminé muy cansado. Los dolores post masaje-sobrecarga no han desparecido. Han sido 10,6 kms a 5:09.

Para terminar, en el título decía que después de las despedidas, ahora a pitufar. Pues sí, el sábado me he inscrito en una carrera en la que tengo muchísimas ganas de participar y disfrutar. Se trata de la PITU-Trail, y es que se disputa desde el pueblo de Júzcar, en el Valle del Genal cerquita de Ronda. El pueblo fue elegido por la productora de la película Los Pitufos para promocionarla, pintándolo de azul y dándolo a conocer por todo el mundo (alguno habréis oído hablar de él). 

La prueba consiste en un trail nocturno de 14 kms con 1.000 metros de desnivel. Saldré desde aquí con Falín y Sergio su cuñado y volveremos en la misma noche después de la paliza, pero seguro que merece la pena y nos divertiremos como enanos .. o como cabras...ya os contaré.