viernes, 30 de mayo de 2014

El reto de correr... La Animal Trail 36K (La Bestia)

Fecha señalada en mi calendario: 25 de mayo. Carrera de las durillas, de las de verdad, el primer test serio tras las "largas vacaciones". Era un objetivo a medio plazo una vez superadas las molestias y comprobar en competición en la verdadera montaña mi evolución. Todos los entrenos iban por buen camino y justo cuando tocaba meter desnivel y distancia empezaron los problemas.

En la tirada de Facinas de hace un mes supongo que me di un golpe por lo abrupto del terreno, aunque la verdad no recuerdo ni cómo ni dónde, pero lo cierto es que terminé con un fuerte dolor en la planta del pie izquierdo, a la altura del segundo y tercer metatarso. No le di mucha importancia pero con el paso de los días fue a peor y casi no podía apoyar el pie. El podólogo vio que había líquido y me mandó de urgencia a la fisio, que en varias sesiones en una semana intentó deshacer "el bulto", a base de presionar con dedos, puño y hasta con un objeto plano para hacer más fuerza. Sin palabras para describir el dolor.

Esto fue con más de dos semanas por delante de cara a la Animal Trail, y aunque mejorando muy poco a poco pasaban los días de forma desesperada sin poder entrenar. Después de 17 días parado hice una última prueba cuatro días antes de la prueba y aunque con alguna molestia ya en caliente no molestaba demasiado. Había esperanzas, pero... al día siguiente pillo un resfriado que va en aumento conforme se acerca el fin de semana de la carrera.

El sábado previo, con pastillas lo más fuerte posible contra la gripe y con el cuerpo tocado tomo la decisión de correr. Si he llegado hasta aquí sin bajar los brazos tendré que intentarlo. Haré honor al nombre de la carrera y seré un "animal".

Así que el domingo muy temprano me fui con los amigos piratas Paco, Dani, David, Jesús y Matraca para el Burgo, en Málaga. Buen ambiente montañero (cuánto lo echaba de menos) y mucho mejor del resfriado (supongo que la emoción estaba por encima de eso). Bártulos preparados con mochila, bastones y demás y a las 9.30 de la mañana salíamos en carrera.


Fueron 36 kms que reconozco me sorprendieron por su dureza. Sabía que no iba muy bien preparado y que sufriría, ya que casi no había hecho desniveles ni distancias mayores de 21 kms, pero no esperaba tanto. El desnivel positivo fue de casi 1.800 metros pero estaban marcados por una subida muy fuerte de los kms 9 al 12, el pico de La Cabrilla, con 1000 metros y desnivel medio del 20%. Tardé más de una hora en hacerlos y luego una bajada bastante técnica y peligrosa me dejó muy tocado.

En esto que llego al km 20 justito con todo lo que quedaba, así que había que asegurar. No arriesgué nada ni en plano ni en bajadas para no cargar más los castigados cuadriceps andando las subidas a ritmo suave. Así aguanté como pude hasta el 30 y ya sabiendo lo que restaba (era el mismo tramo que a la ida pero al revés) sí eché el resto. Pero bueno, tampoco para tirar cohetes, lo suficiente para alargar algo las piernas en llano y para sólo andar en la última subida y llegar de forma decente, corriendo, en un tiempo de 5h 26m, el 77 de la general y 20 de mi categoría.


Muy contento porque superé una prueba que comencé con muchas dudas (casi ni llego) y que fue complicada por su dureza. Eso sí, gran organización, con vistas y paisajes extraordinarios y zonas preciosas por las que correr, andar o lo que se pudiera. Muy recomendable.

Ya han pasado varios días y las agujetas por fin están desapareciendo. Está claro que hay que prepararse más y mejor, pero es sólo el principio. Mis planes a corto han cambiado y descarto las 7 playas y el Trail Doñana ya que son demasiado cerca y no me puedo arriesgar con tantos kms. Ahora toca seguir entrenando a la espera de nuevos objetivos.

viernes, 9 de mayo de 2014

Volviendo a la vida de corredor...para la bueno y lo malo

Ha sido un mes de normalidad, de no pensar en lesiones o recuperaciones del pasado. Sólo ese pequeño pensamiento de temor en la cabeza que tardaré en olvidar, pero físicamente bastante bien, al menos en la parte de la lesión.

Después de los últimos esfuerzos las dos semanas siguientes fueron de tranquilidad. Tiradas de 10 o 12 kms con buenos ritmos y a pulsaciones controladas. También hice alguna de 20 buscando el fondo que es donde noto más carencias. En Semana Santa alguna ruta familiar por la zona de Vejer y Barbate para estirar piernas y una salida de 15 kms en una escapada mañanera.

La semana pasada hice algo de montaña con una excursión muy bonita que hicimos con los amigos y los niños por la sierra de Grazalema. A ver si se enganchan a esto que merece la pena. Aproveché entonces para hacer una subida express al Simancón, pico de 1600 metros, por lo que lo tomo como un entreno más.

Con Dani y Alain en el Simancón
Al día síguiente me fui para Facinas para un buena tirada junto a Inma y Falín. Fueron 20 kms con 800 d+ con unas vistas preciosas en un terreno muy chulo pero tambíén muy pedregoso. Tanto que se supone que me di un golpe con alguna piedra (además de caerme en lo más llano...) y al terminar me dolía mucho en un punto de la planta del pie. Lo cierto es que he terminado en el podólogo y tengo un hematoma bastante fuerte con líquido que la fisio me está intentando quitar antes que se encapsule y tengamos más problemas.

Con Inma y Falín en Facinas
Así que en esas estamos desde entonces. He podido ir al gimnasio pero de correr nada de nada. Este fin de semana supongo que también lo pasaré en blanco antes que arriesgar y la que viene es nuestra feria, así que habrá que compaginar todo...

Ya tengo objetivo a corto plazo, y es la Animal Trail el próximo 25 de mayo, carrera de montaña de cierto nivel a la que nos hemos inscrito varios del club. Vamos a la modalidad de 36 km con 1.500 d+. Me hubiera gustado haberme preparado algo más, sobre todo en desnivel, pero lo del pie me ha parado a la mitad. De todas formas iré en "modo tranqui" y también me servirá para calibrar cómo estoy.

Según como acabe decidiré el próximo objetivo, que será en junio. O las 7 playas de 50 kms que ya hice hace un par de años o el Trail Amanecer de Huelva al Rocío de 60 kms y nocturno con el amigo Falín que ya está inscrito. Ya veremos.

viernes, 11 de abril de 2014

Vamos progresando

Un mes después de la última entrada las cosas siguen bien. Mi evolución es muy satisfactoria, como dirían en el cole, y "progreso adecuadamente". Los entrenos empiezan a ser los de un corredor "normal" y aunque ligeras molestias en zona de aductores después de alguna sesión fuerte me recuerdan a mi amiga "pubalgia" cada vez me siento mejor. He vuelto a mi fisio Silvia pero para un masaje de descarga, primera desde hace mucho tiempo.

Intento no pasarme aunque es difícil. Conforme vas encontrándote mejor te vas exigiendo más y más pero hay que frenarse de vez en cuando. Por eso no he querido aumentar las tres salidas semanales que estoy haciendo, aunque también hago dos entrenos serios de gimnasio entre ellas. La bici también está ahí aunque en este mes no he podido cogerla.

También he empezado a competir, no en plan exigente pero ya se sabe que el dorsal te sube las revoluciones aunque no quieras. El 23 de marzo hice un trail en Barbate con mi amigo Dani y Jesule de 14,4 kms con poco desnivel (200 d+) pero en terreno de arena, por lo que se hizo duro. Fui de menos a más terminando a 4:58 de media. Lo principal es que aunque terminé algo cargado en dos días recuperación total.


Con Dani en Barbate

El siguiente fin de semana, domingo 30 de marzo, también me animé a correr una media plana en mi entorno natral de entrenos de verano, Los Toruños. Fuimos varios del club y junto al gran Jose hice un tiempo de 1:44 h., a 4:56 el km. Un poco justito de fuerzas al final pero no esperaba ese resultado, la verdad. Aguantando bien los ritmos y no tan mal de fondo como pensaba.

Con Jose y Jesús en Toruños

Todo esto me animó a ir el pasado sábado 5 de abril con Jose a hacer una ruta por nuestra sierra de Grazalema uniendo dos de las subidas más duras del Ultra Trail Bandoleros. Del Puerto del Boyar al Simancón, bajada a Villaluenga y luego subida a Grazalema. Casi 30 kms y más de 1500 d+. Sabía que sería duro y me conciencié pero no esperaba tanto. Casi 6 horas de subidas y bajadas continuas en terreno muy técnico y en muchos tramos bastante peligroso al discurrir por rocas que además estaban mojadas. Terminé muy machacado y exhausto. La montaña me puso en mi sitio y tuve que pedir la hora. Reconozco que me excedí aunque no he tenido molestias de la lesión, que es la mejor noticia, pero los cuadriceps una semana después siguen más que cargados. Eso sí, la tirada espectacular y el guía inmejorable. Vaya como está el amigo Jose. Quiero repetirla dentro de unos meses para calibrar mi evolución y poder compararme porque esta primera será "inolvidable".

Con Jose en Grazalema

Después de eso sólo tenía una opción: descanso total. El martes, ya algo mejor, fui al gimnasio aunque los cuadriceps me molestaban bastante. Y ayer miércoles tuve el placer de hacer un entreno con Alvaro, ilustre bloguero (Nenikékamen), gran corredor y sobre todo amigo. Junto a Falín hicimos el recorrido de nuestra Trail Pirata del año pasado. Resultado: pajarón del 15. Desde el principio sabía que no iba bien, sobre todo muscularmente, pero el calor que hacía y la fatiga me fueron mermando hasta tener que parar un par de veces, andar en las subidas y hacer un auténtico esfuerzo para terminar trotando a 7:30 como si fuera un triunfo.

Con Falín y álvaro en nuestra sierrita

Ha sido la pájara más fuerte que he tenido hasta ahora como corredor y sin embargo no por el esfuerzo en sí. Está claro que no había recuperado ni muscular ni orgánicamente y he pagado caro el atrevimiento. El mensaje que me ha dado mi cuerpo: no te pases.... una cosa es recuperarse de una lesión y otra volver a un estado de forma. Me queda mucho mucho camino por recorrer y también he de dosificarme. Así que hasta después de Semana Santa entrenos más relajados para terminar de recuperar. Ya tengo objetivos a corto y medio plazo y este aviso hace que me motive aun más.

lunes, 10 de marzo de 2014

Haciendo planes

Parece que se confirma que mi mejoría es evidente y ya estoy con planes de entrenos semanales, adaptados a mi estado de forma, eso sí. La rutina semanal que intento llevar desde hace un mes es de dos días de gimnasio (tren inferior y superior), tres días de carrera y si puedo un día de bici de montaña.

Mi idea es fortalecer todo lo que pueda en gimnasio, así que durante los próximos tres meses al menos voy a "machacarme" con máquinas y pesas. He encajado los huecos para poder dedicarle un tiempo que creo que es fundamental.

De carrera quiero hacer "sólo" tres días en los que uno será calidad en cuanto a ritmo, otro de rodaje suave y otro en el que iré aumentando distancia y desnivel poco a poco. Según me vea iré manteniendo o modificando esas salidas. Ahora mismo ya estoy haciendo entrenos de 10 kms a ritmos de 5.30 con pulsaciones "decentes" y en distancia he llegado a los 17 kms manteniendo el tipo. De todas formas me falta fondo. Es imposible recuperar más de un año en un par de meses.

El objetivo principal es volver a un nivel medio que iré probando en alguna que otra carrera. No quiero ir a disputarlas a tope, pero sí ir entrando en competición y medir mi evolución. Si las cosas van saliendo seguiremos sumando, si no a recuperar, como en el cole. Para dentro de una semana ya estoy inscrito a una trail cortita de 14 kms y la semana siguiente quizás una media sin desnivel.


Los planes a medio y largo plazo prefiero reservármelos. Pueden ser más o menos ambiciosos según vaya evolucionando, así que esperaré para decidir. Por supuesto que los tengo en la cabeza, pero no me atrevo ni a decirlos en voz baja.

No puedo dejar de pensar en la palabra lesión, porque tampoco se cuando podré decir que no estoy lesionado. Soy consciente que es complicado dejar atrás esta historia, primero físicamente porque parece que siempre queda algún recuerdo de las molestias en la zona del pubis, y también psicológica, porque no me abandona el temor a recaer. Así que hasta que no me enfrente a una prueba de verdad con éxito o a un periodo lo suficientemente largo sin molestias creo que no podré cantar victoria. De cualquier manera ahora mismo no puedo pedir más. No hace demasiados meses ni siquiera soñaba con poder correr ni 3 kms, así que a disfrutar del momento, que todo llegará.

Lo más importante es que ya estoy disfrutando junto a mis compañeros y sobre todo amigos. No quiero dejar de recordar lo fácil que es olvidar los momentos que no creemos importantes y que luego se echan tanto de menos cuando no los tienes. Uno de ellos es simplemente eso, compartir lo que te gusta con la gente que aprecias.

Los piratas orgullosos con el bandolero
Por ejemplo, este fin de semana, donde nuestro Jose de nuevo ha terminado los 150 kms de la Ultra Trail Sierra de los Bandoleros y todos nos hemos sentido parte de su hazaña. Ya van dos seguidos, y yo viendo cómo lo logra. El año que viene....

martes, 25 de febrero de 2014

Ta Moko

El Ta Moko es un tatuaje maorí, pueblo de origen polinesio, de Nueva Zelanda. Cuando decides hacerte uno debes tener claro su significado ya que reflejará la historia o los aspectos que quieras contar, destacar o reforzar. Por eso un verdadero Ta Moko es único e irrepetible.


Éste es un homenaje al esfuerzo y la perseverancia, Es un recuerdo del cambio y una vuelta. Los símbolos representan fuerza, salud, tierra, protección, viajes, perseverancia, la familia y por supuesto los amigos.

domingo, 9 de febrero de 2014

Las buenas noticias

Este año me había propuesto que las entradas del blog iban a ser lo más positivas posibles. Estar lesionado es un rollo, desmotiva y te sientes mal. Si encima la lesión empieza a convertirse en eterna, no veas. Pero no es el fin del mundo, es la mayor lección que he aprendido, y había que demostrarlo. Por eso tenía decidido que 2014 era para levantar el vuelo.

También es verdad que jugaba con ventaja porque mi estado va a mejor, y así ha sido. Desde principios de año me puse un mini plan de entreno-recuperación y después de cinco semanas puedo decir que el resultado ha sido bueno. Cada semana ha tenido dos sesiones de gimnasio con ejercicios de fortalecimiento, potenciación y estiramientos del tren superior, sobre todo de la zona de cadera, y un par de rodajes suaves de 8 a 10 kms más alguna salida en bici de montaña.

Sensaciones corriendo más que aceptables y las molestias casi sin aparecer en carrera. Tan solo al final, ya en frío, pero yendo a menos. Zona de cadera derecha en psoas y aductor, sobre todo. Con descanso y algo de hielo desparecen al día siguiente. Esto es sin forzar la máquina, a ritmos de 5.30 y totalmente en plano.

Tampoco he abandonado a la fisio, aunque ahora voy cada dos o tres semanas, y he incorporado una novedad de la que hablaré más adelante cuando tenga resultados más concretos, porque es complicado de explicar en dos líneas: he tenido dos sesiones de terapia cráneo-sacral. Suena tenebroso, pero creo que me está dando resultado.

A finales de enero hice una salida trail cortita de 10 kms con el Club y como muestra de mi estado incluso me permití inscribirme a una carrera que se celebró el domingo pasado en el Parque Natural de los Toruños, en Valdelagrana, mi segunda casa de entrenos. Se trataba de la Carrera Solidaria Entreculturas que se celebraba en distintas ciudades de España ese mismo día para recaudar fondos benéficos. Fueron 9 kms en compañía de mis compis de club, los piratas, que al final hice a un rimo medio de 5 el km, de menos a más, por encima de lo previsto, pero realmente bien y casi sin acordarme de la lesión.

En la carrera solidaria de Los Toruños

Ayer logré un nuevo hito, me fui a "nuestra sierrita" con mi amigo Jose y rodé 16 kms de trail a ritmo suavito, eso sí, pero con mucho sube-baja. Acabé algo cansado, pero llevaba sin hacer más de 8-10 kms más de un año. Sensación de haber pasado una barrera y aunque con algunas secuelas en aductores más que contento. Hoy con descanso total estoy mucho mejor.

Total, que empiezo a disfrutar. No tengo metas (bueno, alguna de forma difusa...jeje) ni prisas para nada. Sé que no estoy recuperado del todo, que queda trabajo por hacer, pero ya puedo estirar las piernas y entrar en contacto con lo que me gusta.