lunes, 31 de diciembre de 2012

2012, el año ULTRA TRAIL

Se va el que hasta el momento ha sido mi mejor año en lo deportivo. El año en el que probé el trail y las carreras ultra y me engancharon. Como dicen algunos, caí en el lado oscuro. He cambiado mucho en este año. Las experiencias que he tenido en muchos aspectos han hecho que evolucione en mi forma de correr y de enfrentarme a las cosas. Superar con éxito ese tipo de carreras te hace poderoso, te da una fuerza mental con la que sin perder el respeto, hace que no temas enfrentarte a retos complicados. A eso hay que sumarle el trabajo, muchos entrenos y muchos kilómetros, y el resultado es el premio, la recompensa.


Los números de este año lo dicen todo. He corrido en 159 ocasiones para un total de 2.595 kms. He invertido en ello 15.143 minutos, es decir, casi once días completos. De esas salidas, 12 han sido competiciones con 390 kms disputados, de las que destaco las siguientes:

  • Maratón de Sevilla:  En febrero logré el primer hito del año, bajar de 3.30 en la maratón en un día en el que todo me salió bien. También es verdad que había entrenado duro. Gran recuerdo que no olvidaré.
  • 101 kms de Ronda: La gran aventura. Lo que pueda decir es poco. Fue una auténtica experiencia, con cosas positivas y negativas. Hubo tiempo para todo. Disfruté, sufrí y vencí. Estaba preparado y junto a mis amigos conseguí el mayor reto hasta ahora. Al final 16 horas y 45 minutos. El calor que pasamos, el dedo del pie y una distancia y tiempo hasta entonces desconocida para nosotros me hicieron ver las cosas desde el lado difícil, pero salí fortalecido. Puedo decir que los 101 me cambiaron mi forma de ver la vida.
  • Ultra Trail 7 Playas: 50 kms en plano por las playas de Cádiz un mes después. Otra experiencia más que no quise perderme. Quizás ésta fue la locura del año, ya que no estaba recuperado orgánicamente de los 101 además de hacerla con el dedo del pie vendado después de operarlo 15 días antes. La experiencia fue bestial, muy dura. La hice casi en solitario y se me hizo larguísima, sobre todo cuando me perdí a falta de 7 kms sumando tres más al recorrido. Pero la hice en 5 horas, sin parar de correr, tan sólo en el momento de entrar en meta que pegué el car... del año.
  • Marcha Cueva del Gato: Otra ultra de montaña de 45 kms en Benaoján. Fue en octubre, y llegaba bastante bien de forma. Aposté desde el principio y salí fuerte. Mi mejor carrera hasta ahora. El 13 en la general en 4 horas y 50 minutos. Llegué con calambres a meta, pero viendo a mi familia recibiéndome allí se me quitaron todos los dolores.
  • Maratón de montaña de Jarapalos: La guinda del pastel. Una de las grandes que corrí en equipo, o más bien en familia. 42 kms y 2.500 d+. Muy dura, con mucho desnivel pero también preciosa. Ya iba algo tocado pero disfruté mucho, sobre todo en las bajadas vertiginosas que hicimos juntos. La llegada a meta de la mano también inolvidable.


Además de estas carreras, como preparación para la maratón corrí en enero la media maratón de La Cartuja (Sevilla) y la Ruta de Carlos III (Écija). También hice un par de carreras de montaña, en Ubrique, durísima con desniveles "incorribles", y la Animal Trail, que en su versión de 21 kms también disfruté mucho. En verano corrí en Rota una de 8 kms por la playa sufriendo más de la cuenta a tantas pulsaciones. Y ya en diciembre, la Trail Pirata que organizamos en la que realmente no competí, dedicándome a controlar la carrera desde atrás.


En el apartado de lesiones el año fue bien hasta el final, con una rotura de fibras en el oblicuo producida en el gimnasio aunque luego agravada por seguir corriendo. Supongo que el cuerpo tenía que decir basta de alguna forma y eligió esa. A pesar de todo, precisamente el gimnasio es el que me ha ayudado a meter esa carga de kms y soportarla bastante bien. Tampoco puedo olvidar la herida de mi dedo gordo tras los 101 que he ido arrastrando meses después y que todavía tengo que solucionar para este año.

Pero de todo lo vivido me quedo con la amistad y los buenos momentos que he vivido junto a mis amigos. Falín, Jose, David y Sergio. Esto nos ha llevado a crear nuestro propio club, con nuevos horizontes y aventuras por hacer. La organización de la Trail Pirata fue un punto de inflexión y el momento en el que decidimos dar el paso, y espero que 2013 podamos consolidar nuestras ideas y proyectos, incluyendo una II Trail Pirata aun mejor que la primera.


Como resumen no puedo estar más satisfecho. He superado más retos de los que ni siquiera pensaba que estaban a mi alcance. Los límites no sé dónde están. ¿Se trata de encontrarlos o de extenderlos? No quiero llegar a ellos, quiero seguir sumando y disfrutando, lograr más desafíos y ser un campeón conmigo mismo. Ahí estaremos en 2013, y espero que todos vosotros también podáis seguir cumpliendo y compartiendo vuestros sueños.

sábado, 29 de diciembre de 2012

28 días después

Desde el 1 de diciembre en la Trail Pirata no me ponía las zapatillas. Esta mañana he vuelto a hacerlo y he visto el amanecer corriendo. Mi fisio me dio ayer permiso para probarme y así ha sido. Sólo 5 kms, ritmo "cochinero dulce", empezando a 6.30 y acabando a 5.30, y con unas pulsaciones medias de 144 más que aceptables.  La lesión parece que está casi a punto. Tirantez abdominal y de caderas que ya esperaba. Tantos días de inactividad pasan factura pero no me he notado mal en general. Me queda bastante para volver al camino, pero he vuelto a correr y eso me hace feliz.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Días de fisio, turronning y piratas

Ya son más 20 días sin correr. Continúo con mi lesión (rotura de fibras del oblicuo) y la rehabilitación con fisioterapia. Voy casi todos los días y en las sesiones me dan un masaje, ultrasonidos, calor y frío. He mejorado mucho, del dolor agudo inicial en la zona he pasado a una molestia más difusa y los movimientos abdominales tampoco me duelen como antes. Sólo con un estornudo veía las estrellas y ahora eso ha desaparecido.

De todas formas me quedan al menos un par de semanas incluyendo estiramientos y fortalecimiento, según la fisio que me trata, Noelia, pero tampoco se atreve a poner fecha. Mi idea era "reaparecer" el 31 en la San Silvestre que organizan los amigos del Maratón Jerez, pero me temo que no va  a poder ser. Este retraso creo que también va a afectar a mis planes de correr la maratón de Sevilla, así que tendré que esperar para decidir si correrla aunque sea en plan entreno largo.

Ni siquiera me he atrevido a darme una pequeña carerrita por probar ante el riesgo de romperme si las fibras no están regeneradas, así que tengo una sensación de incertidumbre de la fase en la que me encuentro. Por un lado estoy mucho mejor de molestias, pero por otro no han desaparecido al hacer determinados movimientos.

Son muchos días sin hacer nada, totalmente prohibido por la fisio, así que aprovechando la época navideña y las fiestas que vienen me estoy dedicando al turronning, copiando el término que el amigo Manuel me puso en un comentario. Básicamente consiste en relajación total, tanto alimenticia como física y mental. Esto me pasará factura en mi vuelta, pero tampoco está mal de vez en cuando darle libertad al cuerpo. Este fin de semana tengo además zambomba y comida con los amigos, así que más leña al fuego.

Y por último, en estos días hemos tomado una decisión importante algunos miembros del club en el que corremos, el DBM, y ha sido salir de éste para seguir por el camino que últimamente nos habíamos marcado en la senda del trail y ultratrail. No se puede hablar de ruptura porque no es una salida acordada y creo que en general entendida por la mayoría. Seguiremos en contacto y seguro que coincidiremos en muchas carreras.

Ha sido una decisión dura para mí. Todo lo que he hecho hasta ahora ha tenido como fondo el DBM, y con muchos de los que quedan tengo una excelente relación que espero poder mantener. Pero el paso creo que había que darlo, ya que la línea que nos gusta no es la propia del club y no podemos obligar a los demás a seguirla. También es cierto que creo haberle dado mucho al club, todo lo que he querido y podido, la verdad.

Lo siguiente, en lo que estamos inmersos, la creación de nuestro club. Aprovechando la reciente organización del trail le hemos llamado Club de Trail Pirata Jerez y espero que podamos desarrollarnos y crecer en el escenario trail y ultra, aunque siempre sin perder de vista los valores de la amistad, que siempre deben prevalecer sobre las obligaciones o los compromisos. Con Falín, Jose, David y Sergio tengo claro que esto será así, igual que con todos los que quieran acompañarnos. Es una nueva aventura y un nuevo desafío para este 2013.


Y para terminar, Felices Fiestas a todos, runners, blogueros y lectores, y que en 2013 podamos seguir haciendo rutas, gastando zapatillas, contándolo y leyéndolo.

jueves, 13 de diciembre de 2012

Final de año en el dique seco

Ha sido un año muy intenso. Muchos entrenos y sobre todo muchos kilómetros. Mucho disfrute y mucho sufrimiento. Al final todo tiene un límite y mi cuerpo dijo ..se acabó lo que se daba. Eso sí, de la forma más rara que podía pensar.

La carrera del Gato de octubre en Benaoján fue mi pico de forma. Creo que no llegué al 100% pero estaba cerca, y aunque mi objetivo último era Jarapalos me encontré muy bien y le di caña al cuerpo. Fue mi mejor carrera y mi mejor resultado pero también en la que más agoté y apuré mis fuerzas. Llegar a meta con calambres en las dos piernas lo dice todo después de más de 46 kms.

Km 30 del Gato y a tope

La recuperación después de esa paliza no fue fácil, pero supongo que por la buena forma adquirida me repuse mejor de lo que pensaba y en menos de una semana ya estaba por el monte entrenando de nuevo. Es más, seguí un mes realmente fuerte en cuanto a kilometraje y desnivel, con el Pinsapar y el Puerto del Boyar incluidos. De todas formas ya estaba en bajada. El derroche en el Gato había que pagarlo y en Jarapalos no iba a llegar de rositas. Iba bien de fondo y resistencia pero muscularmente tenía bastantes molestias, con un gemelo muy tocado (según mi fisio con alguna micro rotura) y los cuadriceps también cargadísimos.

Un par de días antes de Jarapalos salí a hacer un rodaje suave con Jose, recién llegado de Londres, y noté unas molestias muy extrañas en la zona abdominal. Tanto que casi las ignoré. Esa misma semana había notado algo pero pensé que podían ser incluso gases. Corrí Jarapalos, con muchas precauciones al principio con el gemelo, pero sin grandes problemas. Correr en equipo me ayudó a no exprimirme al máximo, aunque hubo que sufrir en una prueba de esa envergadura y ya el cuerpo recibió el último gran machaque del año.

Acabé muy cansado de todo. A nivel muscular y articular y sobre todo orgánico. A pesar de todo, tras una sesión de fisio y cinco días después pretendí hacer un pequeño rodaje al tran tran para ver cómo estaba. Y sorpresa, no iba muy mal de piernas o de cardio, pero el dolor abdominal era casi insoportable. Cada bote al correr era un pinchazo tremendo. No sé ni como hice casi 8 kms y llegué a casa casi andando. Empecé a buscar por internet (gran error) y me topé con la osteopatía de pubis. Llamada al fisio y sesión urgente más otros días de descanso. Después otro trote y no hay mejoría. Me preocupo de verdad.

Justo en esos momentos estamos en plena preparación de nuestro Trail Pirata, lo que me sirve de distracción para no pensar en la lesión. Incluso en esa semana hice un par de veces el recorrido de la carrera (17 kms y 450 d+!) para probar el track y enseñarlo después a un voluntario. El dolor continuaba, pero más en llano que subiendo o bajando. Curioso. La misma semana de la carrera tengo cita con el traumatólogo y me diagnostica (aunque sin prueba radiológica ni de ningún tipo) una tendinitis del iliopsoas. Para entendernos, el que une la pierna con la pelvis llegando hasta la columna. Lesión típica de corredor trail por las cuestas, según leo, y que encaja en mis molestias. Me manda reposo total y 20 o 30 sesiones de fisioterapia. Uf.

En uno de los ascensos de la Trail Pirata...

No me lo tomé a mal. De hecho pensé que me vendría bien un parón para recuperar de todo, incluido el coco, muy presionado este año con tantas pruebas de exigencia. Antes de empezar con el fisio me permití correr nuestra Trail Pirata, y aunque no la disputé en cuanto a ir rápido sí que me di la paliza subiendo y bajando posiciones por la parte media y de atrás para controlar un poco el recorrido. Vamos, que llegué muerto a meta. Las molestias seguían e incluso habían aumentado, por lo que ahí me despedí de mis zapas en un tiempo.

Lo que ha venido después en estas dos semanas han sido varias sesiones de fisio en las que a pesar de tocar donde dolía no había mejora alguna. Empezó a dolerme hasta al andar, y esto ya extrañó a los fisios. Al final el diagnóstico parece que era erróneo, y lo que tengo es una rotura de fibras del oblicuo derecho. Increíble.

He llegado tan cascado que cualquier parte en que me tocaran encontraban algo. No dudo que tuviera un bloqueo del psoas en el lado derecho tal como me trataron, y que el tendón ilíaco izquierdo estuviera también fastidiado, al igual que la fascia lata que el día que me tocaron vi las estrellas. Pero el dolor abdominal era otro, y si le busco una explicación es para reirse. Recuerdo que un par de semanas antes de Jarapalos le di bastante caña a los abdominales en el gimnasio, y que empecé a usar la máquina para fortalecer los oblicuos,  esa de la plataforma giratoria en los pies. A partir de ahí aparecen las molestias, así que supongo que hice un mal gesto o abusé de la maquinita dichosa y me cargué alguna fibrita que he ido arrastrando y empeorando con el ejercicio  Además es que seguí haciendo abdominales ese mes a pesar del dolor...bruto que es uno. Total, que aunque le di razones a mis piernas para romperse la lesión aparece en el abdominal.

Hoy ya he mejorado algo, pero me dicen que la recuperación es algo lenta y que antes de final de año no podré hacer nada. No me lo he tomado mal, y estoy aprovechando para relajarme en todos los sentidos. Ni running, ni gimnasio. Descanso, buena alimentación y a liberar la mente de carreras. Me perdí una de montaña en Faraján, me perderé la popular de Jerez, y la San Silvestre probablemente pero espero que a principios de año pueda empezar de nuevo con fuerzas renovadas. El 2013 promete, pero ya habrá mejor momento de contarlo.

martes, 4 de diciembre de 2012

"I Trail Pirata Sierra San Cristóbal": nuestra primera carrera

Vista aérea de la primera parte del recorrido

El sábado 1 de diciembre a las 10 en punto de la mañana casi 130 corredores hacíamos la cuenta atrás para dar salida al I Trail Pirata Sierra San Cristóbal. El sueño se convertía en realidad.

La idea había partido mucho tiempo atrás. Salió de la cabeza de Falín como algo posible pero difícil de conseguir. Un trail en Jerez, algo nuevo que nunca se había organizado aquí, en la Sierra San Cristóbal, tan cercana pero tan desconocida para casi todos. Yo me apuntaba al proyecto, al igual que Sergio y Jose, pero eran muchas incógnitas que unidas a la falta de experiencia hacían que no diéramos el paso definitivo.

Hasta que llegó David Matraca. Él fue el que nos empujó a dar el salto. Ya habíamos tenido alguna conversación con él y sabía de nuestras intenciones, pero era algo en el aire. Y de repente el 24 de octubre, coincidiendo con el entreno que hicimos previo a Jarapalos en el Pinsapar recibo una llamada en el móvil de Matraca: "Quillo, ¿montamos el trail ese que queréis hacer o qué?". Ahí empezó todo.

El proyecto inicial era un entrenamiento entre amigos con forma de carrera pero en "plan pirata", no oficial. No podíamos permitirnos contratar un seguro ni cobrar a nadie por algo que ni sabíamos en qué iba a consistir. Se trataba de una prueba y según saliera hacerla más en condiciones al año siguiente. En esa misma semana fijamos el día de la carrera consultando el calendario de pruebas de la zona y le dimos el nombre "oficial".

La foto de familia

Aunque Matraca era ambicioso no queríamos que fuera multitudinaria (de hecho ni siquiera creía que pudiera serlo..) así que intentamos limitar las invitaciones que hicimos a través de un evento que creamos en Facebook. El límite sería de 100 corredores. En pocos días teníamos más de la mitad de las plazas cubiertas y mucha expectación creada con la carrera. Poco después teníamos 130 plazas cubiertas y decidimos cerrar el cupo para que no se nos fuera de las manos. Teníamos a corredores de casi todos los clubes de la provincia y de otras localidades, además de gente ilustre que le daban cartel a nuestra carrera, como Fali Coleta o Kiko Galera.
Subida de Los Pocillos

El recorrido fue diseñado con todo el cariño y la dureza que Falín quiso, y creo que acertó. Aunque al principio lo vi algo durillo luego pensé que era lo justo para dar valor a la carrera. Iba a correr gente no muy acostumbrada al campo, pero cuando lo terminara se sentiría orgullosa de decir que había corrido nuestro trail. El trazado final fue de 17,3 kms y 460 metros de desnivel positivo con un par de subidas serias y otras tantas bajadas, pero con mucho cambio de ritmo y en un terreno con mucho sendero y bosque.

El esfuerzo de David Matraca hizo posible disponer de una camiseta conmemorativa para el que quisiera comprarla y empezaron a surgir nuevas ideas para mejorar la prueba. Gracias a él se consiguieron patrocinadores y algunos colaboradores que nos permitieron tener duchas, bolsa de avituallamiento y bebidas para después de la carrera. Hasta contaríamos con dorsales personalizados con los apodos de todos los piratas que con tanta paciencia hizo de manera totalmente artesanal María del Mar.Y todo gratis para los corredores.

Tanto había crecido nuestro "pequeño trail" que quisimos darle forma y en una noche (larga, eso sí...) creé un blog, casi sin tiempo pero con todas las ganas del mundo, en el que se presentaron todos los datos de la carrera como una "de verdad". Colgamos el track que tantas vueltas nos hizo dar, planos de cómo llegar, vídeos con todo el recorrido, consejos y hasta fotos con montajes de los piratas.

La última semana previa a la carrera fue intensa. Todos los días tuvimos algo que hacer. Reuniones con David y Falín ultimando los detalles, explicando a los voluntarios sus puestos y funciones, diseñando toda la logística en la zona de meta, etc. No quisimos dejar nada al azar.

Balizando el día anterior

El viernes, un día antes de la carrera, nos dividimos el trabajo. Matraca se quedó con su gente preparando las bolsas de avituallamiento y tantas otras cosas que hacían falta y Falín y yo nos encargamos de balizar el recorrido. Fue un día duro, y no tanto por las más de ocho horas que estuvimos poniendo balizas, flechas y señales, sino por todos los inconvenientes que empezaron a surgir a escasas horas de la carrera. Primero nos encontramos la primera parte del recorrido impracticable para hacer una bajada sin peligro. Tuvimos que modificar sobre la marcha la salida por un camino alternativo. Después se nos cayeron de la lista un par de voluntarios, entre ellos la ciclista que nos abría la prueba. Falín no dudó en suplir esa función renunciando a correr "su carrera", lo que dice todo de su categoría humana. Y para colmo nos prohibieron entrar en una de las zonas más bonitas del recorrido, los hangares militares del Rancho de la Bola. Al menos conseguimos convencer al encargado de "no vernos pasar" por otra zona, aunque con la condición de no balizarla. Teléfono en mano nos pusimos a la busca desesperada de más voluntarios y luego organizarnos con ellos para explicarles su nuevo puesto de acción. Más tarde incluso nos dio tiempo a cambiar el track y a avisar de los cambios a todos los corredores. El día acabó muy tarde, pero con la sensación de haber superado una dura prueba entre los tres antes de empezar a correr la propia carerra.

Buen ambiente

Y llegó el gran día. A las 7.30 de la mañana ya estábamos montando la zona de salida y meta y poco a poco se fue formando un gran ambiente de carrera de verdad, con muchos amigos y sobre todo compañerismo. Después de un briefing informativo dado por Falín se dio la salida de nuestro trail a las 10 en punto, algo que también estaba entre los objetivos, que para algo nos lo habíamos tomado en serio. Sólo ver como partían todos los corredores me hizo emocionarme y acordarme de los dos grandes ausentes del día: Jose y Sergio, que en esos momentos se mordían las uñas en Londres y Santander, respectivamente

La cabeza de carrera tirando fuerte desde el principio

De la carrera en sí se puede decir que tuvo un gran nivel. La ganó como se esperaba Kiko Galera, uno de los grandes de Andalucía y también de España, pero cerca estuvieron gente de aquí que también demostraron su categoría. Basta decir que los 19 primeros hicieron un promedio por debajo de los 5 minutos el km...en montaña! Y sí, también tuvimos cronometradores. Y entrega de diplomas conmemorativos a los ganadores, tanto hombres como mujeres, en este caso ganado por Arancha Almazán.

Con el podium masculino

Después de la cervecita o "cruzcampina matraqueña" tuvimos una comida de convivencia en la que estuvimos los más cercanos y donde por fin pudimos relajarnos algo después de un día  tan intenso (bueno, más bien una semana).

Con los voluntarios

Tengo que destacar la labor impagable de los más de veinte voluntarios que sin ninguna obligación y con todo el entusiasmo quisieron estar con nosotros y por los que se pudo hacer esta carrera. Gracias a ellos por colocarse en plena sierra en un día tan frío con temperaturas bajo mínimos indicando el recorrido a los corredores o seguir el trazado en bicicleta, por estar apostados en tantos lugares inmortalizándonos con sus cámaras, por estar al pie del cañón entregando los dorsales, cronometrando y controlando la llegada a meta, entregando la bolsa de avituallamiento y tantas otras cosas más.

Con dos grandes

La experiencia ha sido increíble. Ha sido una forma distinta de vivir las carreras pero con la misma conclusión que cuando las corro: el esfuerzo tiene su recompensa. Han sido unos días, unas semanas, muy intensas que he podido compartir con dos grandes personas, Falín y David. Gracias también a ambos por el entusiasmo y la entrega demostrada, siempre dando facilidades y ofreciéndose a todo.Creo que hemos encajado a la perfección y cada uno ha aportado su parte en este proyecto que con tanto éxito ha visto la luz. Ahora toca revisar cosas a mejorar e ir pensando en la segunda edición de nuestro Trail Pirata.

Dejo un enlace al blog oficial de la prueba donde hemos colocado enlaces a las muchas fotos que se hicieron del evento: I Trail Pirata Sierra San Cristóbal

sábado, 24 de noviembre de 2012

"L" de Liado y Lesionado

Jarapalos me ha dejado huellas, casi todas positivas, pero también me ha dejado tocado. Ha sido una de las carreras más bonitas pero también exigentes que he hecho, supongo que la que más, y la experiencia ha sido bestial. Conforme han pasado los días y han ido colgando las fotos oficiales en la web de la prueba he podido recordar y disfrutar más de todos los momentos vividos junto a mis amigos, además de constatar que la organización estuvo increíble en una prueba nada fácil de coordinar.


Nuestra llegada en equipo

En cuanto a la parte negativa, totalmente lógico a consecuencia del esfuerzo, la carrera me ha consumido energías, de las que la verdad también llegaba algo justo. He estado una semana "flojo", semi vacío, pero creo que ya me he recuperado después de unos días más relajados en alimentación "reponiendo la despensa".

Había que concentrarse en las bajadas

El recorrido, espectacular

Lo peor es que me ha aparecido una lesión en la zona del bajo abdomen, en el pubis, que aunque no me impide correr me produce un dolor intenso sobre todo en frío. Ya había tenido algunas molestias desde hace varias semanas, incluso antes de Jarapalos, pero se han transformado en dolor. De hecho tras cuatro días de descanso rodé 6 kms y tuve que parar y dos días después lo mismo. Me asusté un poco y fui al fisio. En principio le quitó importancia pero me recomendó muchos estiramientos de la zona de cuadriceps y bajar el ritmo de los entrenos, ya que la tensión que tengo en esa zona hace que haya una descompensación y me duela al extender y apoyar las piernas en cada zancada. De todas formas para estar más tranquilo esta semana voy al traumatólogo para que me vea y me haga las pruebas que hagan falta (placas, resonancia o lo que sea). No quiero arriesgarme a caer en una lesión mayor o crónica, que por lo que he leído (qué malo es internet para estas cosas...) esa zona es muy delicada y propensa a eso.

El esfuerzo mereció la pena

Los entrenos por tanto los he limitado bastante con tan solo dos salidas muy cortas la semana pasada y otras dos en ésta y una sesión de gimnasio en el que no tengo molestia alguna. La lesión no me impide correr y no sufro, pero estoy limitando y controlando mucho el esfuerzo para no estar totalmente parado. Incluso diría que estoy algo mejor que la semana pasada, pero ya me dirá el médico.

Lo que sí me tiene muy liado es la carrera que estamos organizando junto a Falín y David Matraca, el I Trail Pirata Sierra San Cristóbal, que empezó como una carrera entre colegas para probar lo que podía ser algo más en futuras ediciones pero que en su estreno va a ser mucho más seria de lo que imaginábamos. Señal de ello es que hemos tenido que dejar de inscribir gente, estando ahora mismo en 125 corredores cuando dijimos de no pasar de 100 y poder controlar una carrera por nuestros propios medios.

Recorrido y perfil de nuestro Trail, by Falín

El recorrido, diseñado por Falín con toda su imaginación y maestría, las inscripciones (coordinadas magistralmente por Matraca), los voluntarios (de 15 a 20 personas que estarán apoyando el evento en diverso puntos del trazado y en la zona de meta), los dorsales personalizados, el balizamiento y la señalización de la carrera, los avituallamientos (gracias en su mayoría a colaboraciones desinteresadas de algunas marcas como Coca-Cola o Herbalife), la camiseta conmemorativa, las duchas al finalizar (también ha colaborado el gimnasio Jerez Sur), la comida de convivencia con las familias, y muchas más cosas hacen que estemos casi todo el día dándole vueltas al tema para que no se nos escape nada y la semana que viene tengamos que hacer un esfuerzo extra para poner todo en pie.

Mi dorsal, gracias a super Matraca
Es mi primera experiencia en esto y está siendo muy gratificante, cuando todavía estamos a una semana del evento. Junto a Matraca y Falín creo que hemos formado un buen conjunto en el que cada un aporta cosas distintas y el resultado es que estamos creando una carrera con muchos alicientes. Espero que esto sea sólo el embrión de algo mucho más grande, porque le estamos poniendo todas las ganas y el esfuerzo posible. Por si queréis visitar la web creada para la ocasión os dejo el enlace: I Trail Pirata Sierra San Cristóbal

Debido a esto del Trail Pirata casi no tengo tiempo de visitaros a los colegas blogueros así que os pido disculpas. Al menos me está sirviendo de distracción para no pensar en las molestias del pubis que si no me tendría agobiado. El próximo reto es la maratón de Sevilla y el plan que quería hacer debería de empezarlo la semana que viene, cosa que ahora mismo veo imposible. Así que me dedicaré a la carrera y el tiempo y el médico me dirá el camino a seguir después. Paso de comerme mucho más el coco.Ya os cuento...

miércoles, 14 de noviembre de 2012

El reto de correr... la XI Maratón Alpina de Jarapalos (10/11/2012)

Fin de semana en Alhaurín de la Torre, Málaga. Acudimos a correr en equipo la maratón de montaña por excelencia de Andalucía, Jarapalos. Era mi objetivo de final de año y para ello me había preparado a conciencia. Antes había corrido la Cueva del Gato a la que llegué bien y así fue el resultado, pero un descanso mal planificado o más bien un exceso de entreno me produjo una sobrecarga en el gemelo que me impedía llegar como estaba en mis planes. Sesiones de fisio, más descanso y leves rodajes suaves me llevaron hasta la cita en unas condiciones aceptables pero no al 100%. La duda era cómo aguantaría el gemelo tanto desnivel positivo, y con esa sensación nada deseable me presenté en la carrera.


Llegamos  el viernes por la tarde acompañados por nuestras mujeres, lo cual fue un aliciente más. Tras recoger los dorsales y el chip escuchamos la charla técnica (se nota la planificación de la carrera y el nivel de ésta) y el comienzo de una conferencia sobre las últimas hazañas de dos grandes del ultrafondo, Fali Coleta y Mark Wooley el Inglés, organizador de la prueba. Después de la cena al hotel a descansar porque había que madrugar bastante.

El equipo con los dorsales recién recogidos

Una hora antes de la salida ya estábamos el sábado por la mañana en la zona de partida, los Llanos de Peñaprieta. Rato de charla, preparación, logística, "deberes pendientes" y estiramientos. No me encontraba mal pero tampoco estaba confiado en mi gemelo. En general los cuatro llegamos preparados, pero las caras de todos demuestran cierta responsabilidad. Falín creo que es el que mejor está a priori, pero las largas distancias le pasan factura muscularmente y es su preocupación. Jose no ha entrenado prácticamente desnivel y en Londres tampoco ha podido seguir un plan muy estricto. Sergio tampoco ha tenido mucho tiempo pero se ha machacado en el último mes. Cada uno aportará lo máximo, y el resultado estoy seguro que será positivo. Correr en equipo significa que hemos de ir y llegar juntos, por lo que las probabilidades de cualquier incidencia se multiplican por cuatro. Lo más importante es que llegamos con la idea de que nuestro triunfo es terminar, disfrutar y compartir todo lo que nos pase.

Estoy pensando en todo esto cuando se da la salida a las 8 en punto. Mañana fresca pero sin lluvia con unas condiciones en general bastante buenas para correr. Quizás el terreno algo blando y resbaladizo pero después del temporal de días atrás era lo mínimo que podía esperarse. La salida nos lleva por un carril forestal en ascenso hasta entrar, como novedad este año en Jarapalos, en un sendero bastante técnico en subida y muy duro. En total en esos 6 primeros kms subimos 600 metros hasta llegar a la Fuente de la Mezquita y luego al Puerto de la Graja. No llevamos mal ritmo, y aunque no voy forzado el gemelo está agarrotado y temo que nada más empezar haga la trastada. Me quedo algo conservador. Sergio y Falín siguen adelante por ese orden con Jose detrás de mí. Así llegamos al final de esta primera subida, en una hilera continua de corredores a los que es casi imposible adelantar ya que casi todo el tiempo se va andando (imposible casi ni trotar por el desnivel y el terreno técnico). No me ha ido mal pero con lo que queda por delante las dudas me asaltan.

Después afrontamos un falso llano que nos lleva hasta Puerto Málaga con otros 400 metros de subida. Recupero algo y nos reagrupamos. En un despiste cogiendo el bidón de agua sufro una caída  la primera de varios amagos que tuve pero la única que me lleva al suelo. Pequeños rasguños que terminan en risas… buena señal. Al poco comienza una bajada muy fuerte de 500 metros de desnivel hasta la Ermita del Calvario de Mijas, y ahí nos lucimos con un despliegue de técnica y riesgo adelantando a mucha gente. El esfuerzo en los cuadriceps también es fuerte y la concentración máxima, aunque de vez en cuando disfruto de unas vistas preciosas de la Costa del Sol.

En una de las bajadas

Logro un poco de descanso en un sendero en forma de toboganes hasta llegar a la Cantera del Barrio y a continuación iniciamos agrupados la segunda subida y la más conocida, ya que acaba en el Pico de Mijas, conocido como "la bola", con casi 700 metros de desnivel positivo en 5 kms. Jose y Falín aprietan un poco pero decido quedarme con Sergio. Primero por ir juntos y segundo porque sigo sin querer machacar el gemelo, que ya me ha dado algún aviso. Me agobio pensando que me queda otra subida después incluso más dura que ésta. Sin embargo, conforme vamos avanzando voy cogiendo confianza me voy encontrando cada vez mejor. Me encantó esta subida porque iba rodeando la montaña y permitía unas vistas increíbles y divisar buena parte de la carrera, por delante y por detrás. La siguiente bajada por el sendero del Cerro de los Conejos vuelve a ser un espectáculo, con continuos derrapes o resbalones, según se mire. Vamos bien, cada uno se ha acoplado a la carrera y la tenemos controlada.

Ya sólo queda el último y más duro ascenso, por el Sendero del Tajo del Caballo. El nombre ya de por sí asusta, y aunque algo peligroso con cortados que quitan el hipo es la parte más bonita. Subimos 600 metros en 4 kms que se hacen muy muy largos. De nuevo me quedo con Sergio y Jose con Falín por delante algunos metros. En un tramo hasta llegamos a utilizar cadenas para subir unas rocas. Al final alcanzamos la cima en un avituallamiento en el que la gente llega muy tocada. A pesar del cansancio estoy contento, ya que ahora sí sé que el gemelo me va a respetar. He conseguido "engañarlo" hasta llegar aquí, usando la otra pierna  sin forzar en los apoyos y hasta intentando no levantar demasiado los pies del suelo. Es complicado ir pensando en todo esto pero si no lo hubiera hecho no hubiera podido con las tres subidas.

Detrás de Sergio en una de las bajadas

Después de reponer fuerzas encaramos una parte de carril llana y en bajada en el que reducimos bastante el ritmo. Sergio va algo tocado pero el trabajo está hecho. No hay que arriesgar o machacar más de la cuenta. Pero en esto que llegamos al penúltimo avituallamiento y nos dicen que vamos en tercer o cuarto lugar por equipos. Es como si nos hubieran inyectado adrenalina. En el fondo sabemos que el tercer puesto no es posible, pero por si acaso nos ponemos las pilas y hacemos una bajada muy técnica y peligrosa "a hierro". Con Sergio a la cabeza no sólo garantizamos nuestra posición sino que pasamos a un montón de gente que no se dedica a "hacer el loco" a estas alturas de la carrera. Parece mentira lo que el cuerpo es capaz de dar después de 38 kms tan sufridos. Realmente disfrutamos como enanos… y salimos ilesos.


El último km fue de emoción entrando en meta cogidos de la mano en un momento inolvidable. Al final hicimos cuarto puesto en equipos y 144 en adelante en la general con un tiempo de 5 horas 39 minutos. Mis pulsaciones medias fueron de 151 y la sensación de haber terminado mejor que empecé, muy cansado pero bastante entero. Al final clavamos el tiempo que teníamos previsto, aunque con un par de kms más que en el track inicial. Las subidas fueron más duras de lo esperado con algún km en 14 o 15 minutos pero en las bajadas pusimos la carne en el asador recuperando y ganando mucho tiempo y posiciones.

Cansados pero satisfechos

La carrera, espectacular en todos los sentidos. Por algo es una referencia en el trail de España y Andalucía. Tanto el recorrido como la organización, increíbles. Como he leído por ahí, ningún metro de subida o bajada era gratuito, todo estaba justificado. Si a esto le sumo la experiencia de poder compartirlo todo con tres grandes amigos y deportistas puedo decir que no olvidaré esta carrera. Y encima rematamos el fin de semana con nuestras mujeres. Todo perfecto. Para repetir.

martes, 6 de noviembre de 2012

Tapering "obligado", "oficial" y planes para Jarapalos

Un día después de una paliza por la montaña de 35 kms y con los entrenos de estas últimas semanas que también han sido duros lo razonable era descansar, pero la agenda no me cuadraba el resto de la semana y para encajar todos los entrenos me "obligué" a ir al gimnasio ese lunes y lo que es peor, hacer una tirada de 13 kms el martes. El resultado, una fuerte sobrecarga en el gemelo izquierdo y otra parecida en el derecho. Lesión más que merecida y el susto en el cuerpo a 10 días de Jarapalos.

Así que "tapering obligado" con Traumeel y frío todos los días y sesión urgente de fisio. Al final cuatro días parado y un moratón con una semiquemadura por el hielo en el gemelo ha sido suficiente y parece que apenas hay molestias.

El resumen de la semana pasada ha sido muy breve: un día de gimnasio, la salida de la lesión y la de prueba del domingo, unos 10 kms en progresión. Ni pongo datos de pulsaciones porque carece de importancia. Eso sí, todavía dándome cabezazos por no hacer lo que me decía la cabeza. Seguimos aprendiendo.

Y esta semana ya sí entro en "tapering oficial". Serán dos rodajes suaves con algún cambio de ritmo y una sesión de gimnasio que sobre todo de piernas será sin demasiado peso. Además el miércoles me daré otro masaje para intentar dejar el gemelo lo más descargado posible.

El viernes ya estaré en Alhaurín de la Torre (Málaga) para disputar al día siguiente la carrera que como adelanté haremos en modalidad de equipos y a la que vamos cuatro buenos amigos y compañeros de nuestro club, el DBM Jerez (Falín, Jose, Sergio y yo). La idea es "pasarlo bien", si se puede hablar de eso en una prueba de montaña de 42 kms y 2.600 metros de desnivel positivo acumulado, pero supongo que nos entendemos, o dicho de otro modo, "no pasarlo demasiado mal".

La maratón de montaña de Jarapalos es una de las marcadas en el calendario en Andalucía, una de las grandes, con  mucha reputación, y por algo será. Su organizador, Mark Woolley (el inglés) también es bastante conocido por sus logros en la ultra distancia y por la buena organización de la prueba. Viendo el perfil tenemos tres grandes subidas y sus bajadas correspondientes, pero al parecer la más dura es la tercera, a lo que hay que unir el desgaste que llevaremos. Así que intentaremos llegar a ese punto lo más enteros posibles y después apuraremos lo que podamos.


Partiendo de que vamos en equipo y que hay que llegar juntos a meta hemos analizado nuestras posibilidades como tal y sin arriesgar demasiado pero sin saber tampoco cómo llegaremos a la parte final y más dura de la prueba estimamos que haremos algo menos de 6 horas. Es un tiempo aceptable, y más después de leer algunas crónicas de ediciones pasadas y ver el perfil y los porcentajes de desnivel.

Creo que mejor ir de prudentes que no darse el patinazo. No buscamos la gloria, queremos divertirnos haciendo lo que nos gusta, y qué mejor forma que haciendo piña, entre amigos, ayudándonos y compartiéndolo todo, lo buenos y malos ratos, como un auténtico EQUIPO.

sábado, 3 de noviembre de 2012

2 años de blog

Hoy 3 de noviembre cumplimos dos años. El blog ha ido creciendo y de ser una especie de diario personal que no iba a leer nadie ha pasado a ser una forma de comunicarme con muchos amigos y de compartir retos y experiencias. Es una obligación más, los que también lo tenéis lo sabéis, pero las satisfacciones que produce compensan con creces esos "ratos" que hay que sacar para ponerlo al día.

Ésta es la entrada 133, y con 21.750 visitas a día de hoy y 1.665 comentarios (creo que casi ninguno malo....jeje) estoy más que orgulloso. Por un lado de poder contar cosas, pero sobre todo de saber que hay muchos que las leéis. He conocido a muchos amigos a través del blog y sé que hay muchos que no comentan pero también son asiduos seguidores, así que a todos, muchas gracias por estar ahí. En más de una ocasión he sentido que corría junto a vosotros y en muchas otras que no podía defraudaros en plena carrera o entreno. Todos os habéis convertido en una de las principales razones para conseguir todos los retos y compartirlos después.

Aquí seguiremos un año más...

domingo, 28 de octubre de 2012

Más que entrenos por la sierra

A dos semanas de Jarapalos ésta pasada era clave en la preparación. Era la última oportunidad de hacer entrenos de calidad y volumen, así que ese fue el objetivo y así se ha cumplido. Cuatro entrenos más una sesión de gimnasio, pero dos de ellos han sido espectaculares, tanto por volumen como por desnivel.

"Buenos chicos" en el Pinsapar

El miércoles nos juntamos cuatro grandes amigos y aprovechando que Jose el londinense estaba unos días aquí preparamos una tirada especial. Rodaje por el Pinsapar con ida y vuelta desde Benamahoma pasando por el pico de las cumbres. Parque natural en el que hay que entrar solicitando un permiso días antes. la verdad es que nunca había estado y mereció la pena. Entreno con mayúsculas con mucho desnivel hacia arriba casi sin parar. Parecido a lo que nos encontraremos en Jarapalos.

Con Falín en el Puerto del Boyar

Y hoy domingo, tal como lo definió Falín con el que lo he compartido, el entreno ha sido brutal. Partimos desde El Bosque siguiendo una ruta de Fali Coleta con destino el puerto del Boyar pasando por el Albarracín y volviendo de nuevo al Bosque por el río Majaceite. Esto ha sido el resumen, porque entre la dureza del recorrido y que nos hemos perdido en más de una ocasión hemos acabado tiesos, con arañazos hasta en la planta de los pies y hasta boquetes en los zapatos. Pero de nuevo ha merecido la pena rodar en parajes tan espectaculares.

El resumen de la semana:

  • Lunes 22/10: Rodaje a ritmo vivo de 15 kms a 5 min/km y 143 ppm. Al poco de salir me encontré con mi cuñado que está empezando en esto y rodé con él un km. Superar esta fase inicial es garantía de éxito. Ánimo cuñao!
  • Martes 23/10: Gimnasio tren inferior y superior. Cada vez me gusta más, sobre todo viendo los progresos.
  • Miércoles 24/10: Gran tirada larga trail por el Pinsapar con 24 kms, 1.530 d+ a 7:30 de ritmo medio   y 148 ppm.
  • Jueves 25/10: Rodaje suave de recuperación de 12 kms a 5:22 y 140 ppm.
  • Domingo 28/10: Brutal tirada larga por la sierra de 35 kms en casi 5 horas (a 8:27 el km) con 1.640 d+ y 142 ppm.

En total han sido 86 kms en cuatro salidas y 3.100 metros de desnivel positivo acumulado. Creo que tengo la tarea para Jarapalos hecha. La próxima semana bajaré ya algo el kilometraje y también los desniveles para ir poniendo el cuerpo a punto  antes del tapering final. Las sensaciones son muy buenas y el disfrute supera con mucho al sufrimiento. Destaco la capacidad de recuperación  que creo que es clave en la montaña. Los momentos malos aparecen, pero superarlos y volver a coger aire es fundamental.



Cambiando de tema también esta semana me he metido junto a dos grandes corredores y amigos (Falín y David Matraca) a organizar lo que hemos llamado el I Trail Pirata Sierra San Cristóbal. Todavía estamos perfilando los detalles, y aunque es un embrión de una carrera que llevamos tiempo pensando organizar (Falín es su mentor y Matraca el que nos ha dado el empujón final) nos hemos lanzado y vamos a hacerla este año para probar, sin inscripción, pero con toda la ilusión del mundo y con ganas de que los asistentes pasen un gran día de trail y running entre amigos. De momento la aceptación está siendo tremenda, cosa que nos emociona y nos llena de responsabilidad. Ya iré contando.

lunes, 22 de octubre de 2012

Recuperando el tono sin tiempo que perder

La semana siguiente a una carrera debe ser de recuperación, o mejor dicho, de descanso. En el caso de una prueba dura como la del Gato así debió ser pero no hay tiempo para eso y por suerte mi cuerpo no ha necesitado demasiado. En menos de un mes tengo una cita de las importantes en Jarapalos y mi cuerpo lo sabe. Muscularmente he necesitado tres días para volver a correr pero psicológicamente ya estaba enchufado desde el día siguiente a la vuelta de la sierra.

Así que han sido tres días de parón total. El miércoles hice un rodaje suave de 10 kms a 5.20 y 132 ppm que empezó mejor que terminó. Cansado de piernas como era de esperar. El jueves, aunque sabía que no debía fui al gimnasio pero disminuyendo las cargas del tren inferior. Al final creo que no me vino mal la sesión.

Amaneciendo con Arcos al fondo
Y el sábado otra vez al monte con el amigo Falín en una tirada madrugadora desde Arcos al pantano de Bornos y vuelta a Arcos. Buen rato y sensaciones en 23 kms con 510 d+ a 6 el km y 150 ppm. Hubo de todo: llaneo por caminos a buen ritmo, subidas con pendientes serias, vistas de un amanecer precioso y sobre todo buen rollo con mi gran compañero.

Esta semana ya hay que ponerse serio otra vez y machacarse para lo que viene. Toca un poco de todo: calidad, fondo y sobre todo montaña. Para colmo el miércoles tengo un entrenamiento especial en el pinsapar con el amigo Jose el londinense. Esto promete.

lunes, 15 de octubre de 2012

El reto de correr...la II Marcha Cueva del Gato

Había llegado el momento de "ponerle el cascabel al gato". Llevaba semanas de dura preparación con muchos entrenos de fondo, trail, desnivel y también de gimnasio. Llegaba bien. Mi buen amigo Falín me lo repetía y aunque yo me resistía en el fondo sabía que no iba mal, pero ni mucho menos esperaba hacer la carrera del sábado. Además desde el martes padecía una faringitis que me acompañó hasta el inicio de la carrera, y me había tocado un poco la moral.

El fin de semana se presentaba atractivo y así fue. Me alojé en una casita rural en Montejaque con la family, a 3 kms de Benaoján de donde partía la carrera, y aprovechamos para hacer alguna ruta con los enanos. De hecho el viernes "estiré" las piernas visitando la Cueva del Hundidero con un buen tramo de subida.

El sábado a las 8.30 ya estábamos en Benaoján para la salida. Allí tuve el placer de conocer y saludar a Fali el Coleta, al que con tanto interés y asombro había seguido en su hazaña de completar el Ocho Alpino hace menos de dos meses. Un tío simpático y muy cercano. Ya en el arco de salida me encuentro con mis compañeros del club Paco y Jesule. Cada uno con sus objetivos claros. Para Paco es su primera carrera de montaña y todo un reto. Para Jesule es la primera larga, aunque ya tiene algo de experiencia en trails. Buen rollo pero los nervios del inicio se palpan en el ambiente. Buena señal.

Un lujo saludar y compartir carrera con Fali "Coleta"

Como buen y cuadriculado estratega me había hecho mi plan de carrera. En estas pruebas largas siempre hay que saber lo que nos viene y tener una idea de lo que queremos hacer. Luego las cosas pueden ir a mejor o peor, pero las cuestas están ahí y mejor saberlo antes que encontrarlas por sorpresa. La idea era pasar los 6 primeros kms de fuerte subida sin desgastarme demasiado y poner un ritmo más alto en el llano y bajadas para recuperar posiciones. Según avanzaran los kms se podría apretar o aflojar, pero estimaba un tiempo sobre las 5 horas y cuarto.

Los DBM "gatunos"

Salimos a las 9 en punto. Del tirón para arriba. Primero cuestecita por el pueblo y luego al monte sin contemplaciones. Aunque quise salir en la parte delantera me quedé en un embudo y casi no pude adelantar hasta llegar al campo, pero en las típicas hileras por el carril de ascenso también era difícil. Me sentía bien pero decidí aguantar para cumplir con el plan. Pero en esto que llega por detrás un colega con unos bastones a un ritmo muy bueno pidiendo paso. Es Fali Coleta. Decido seguirlo con valentía. Pone una marcheta continua mezclando andar con pequeños trotes en la ascensión. Hacemos juntos los 5 kms con 500 metros de desnivel positivo y rampas del 26%. No era lo previsto pero me sentía fuerte. Adelantamos a muchísima gente y ya nos colocamos en puestos de arriba.

Hasta el km 11 vino una parte de llano en la que Fali se fue apretando y yo me quedo decidiendo conservar. Quedaba mucho y no era cuestión de echarlo todo por tierra en 6 kms. Me quedo en un grupo con otros 4 corredores. Hago amistad con un panadero de Benaoján (no recuerdo su nombre), que casi sin dormir hacía su primera prueba de larga distancia. Al final tuvo que retirarse por mala suerte con un problema de rodilla. Me pongo a tirar del grupo por debajo de 5 el km. Llevo las pulsaciones por encima de las 150 que me gusta controlar pero es normal con la traya que me estoy metiendo. Pensé que ya habría tiempo de rebajarlas...(iluso).

Del 11 al 20 viene una parte de descenso en general donde dejo el grupo y voy pasando a más gente. El terreno me va bien con piedra suelta y roca y pongo un ritmo en algunas zonas muy fuerte, rozando los 4 minutos el km. Voy fuerte. De ahí al 30 es un sube baja continuo que me machaca mucho las piernas y donde empiezo a notar cansancio. Bajo un poco el ritmo y me da un pequeño bajón. Además me quedo solo casi todo esa parte que se me hace dura. En alguna subida ando para recuperar, ya que las pulsaciones se me están yendo de la mano, rozando las 160. Aparece el espíritu cientounero para aguantar el tipo y agarrarme a la carrera.

Llegando a un avituallamiento

En el puesto de avituallamiento de ese km 30 me dicen que voy sobre el puesto 20 y eso me da el empujón que necesitaba. Alcanzo a un corredor suizo con el que cruzo unas palabras y sigo hacia adelante. El colega venía de La Breña de dar... 5 vueltas! Me alcanza uno del Corduba Trail que lleva un ritmo muy bueno y me engancho un rato a él. Cuando me vi demasiado forzado lo dejé ir. Al final veo que quedó séptimo, y es que iba muy bien. Esto me sirvió para alcanzar a un trío que también iba renqueando. Estamos sobre el 35 y a nadie le sobran las fuerzas. Nadie habla y me coloco al final a ver qué pasa. Mi idea es llegar con ellos a la última gran cuesta y allí que cada uno haga lo que pueda. Pillamos a Fali que también va tocado y nos deja paso.

En el 38 aprieto algo y sin querer dejo al grupo. De hecho no era consciente hasta que miré para atrás y me vi solo. Llego al penúltimo avituallamiento y por los ánimos que me dan intuyo lo que me espera. Es la una de la tarde, un calor tremendo y hay que subir la cuesta de la Cueva del Gato, la que da nombre a la carrera. Son 1.500 metros de subida continua con 190 metros de desnivel y pendientes de hasta el 30%. La mezcla de dureza, de poder con todo y de sufrimiento es indescriptible. Los pensamientos positivos aplastan a los negativos. No hay más remedio. De cabeza voy bien pero las piernas comienzan a fallar y primero los cuadriceps y luego los gemelos hacen amagos de bloquearse. Trato de acompasar el ritmo y no forzar la pisada, pero en una subida de ese tipo es difícil. Tengo que parar un par de veces a estirar porque creo que me quedo allí y apretando los dientes alcanzo la cima y el último puesto de avituallamiento. Me inundan en Réflex y estiro un poco.

Me queda el último tramo, 2 kms en bajada y un pequeño repecho hasta la llegada. Las piernas van algo mejor pero lo justo para bajar casi de puntillas. Alcanzo ante mi sorpresa a Oscar, todo un crack que ha tenido problemas de rodilla y va andando. Lo siento por él porque tendría que estar en puestos de podio. Llego al pueblo y me queda la subida hasta la meta. No puedo correr y la hago andando pero a pocos metros y llevado por la emoción del speaker y sobre todo de ver a la family corro para entrar en meta totalmente emocionado y de la mano de mi "enano chico".



La emoción da paso al bloqueo de piernas y con los calambres me llevan a la zona de fisios donde intentan recuperarme con réflex. Allí me ayuda mucho hasta que me hace andar de nuevo Juan Luis , al que casi ni conozco y me demuestra que los grandes corredores (fue el ganador del año pasado) pueden ser mejores personas. Recordaré siempre este gesto.

Ya repuesto me entero que en la carrera infantil que han hecho por la mañana mi "enano mayor" ha quedado segundo. Ahora encima estoy orgulloso. Cervecita para celebrar todo y un buen bocata mientras espero la llegada de Paco y Jesule, que también han conseguido su objetivo. La organización perfecta y la carrera muy recomendable.

Al final decimotercera posición en la general de 395 participantes con un tiempo de 4 horas y cincuenta minutos en los 45,6 kms y 1.600 de desnivel positivo acumulado. Ni yo me lo creo, pero me confirma que el esfuerzo tiene su recompensa. Más allá de la posición o el tiempo me quedo con lo gratificante de superar otro reto, de poderlo compartir con mi gente (ver a mis hijos y mi mujer en la meta fue increíble), del compañerismo que sentí tan de cerca y sobre todo de un fin de semana disfrutando junto a mi familia.
Todo fueron éxitos


martes, 9 de octubre de 2012

Con mis "trabucones" no me comerá la lengua el gato

El lunes pasado llegaron a casa mis nuevas zapas de trail, unas Asics Gel Fuji Trabuco, o lo que es lo mismo el modelo siguiente a las Trabuco 13 y 14 que ya tengo. Las primeras las compré del número 45, el mismo que uso en asfalto, y que me aprietan casi desde que me las pongo, así que sólo tienen 300 kms y pocos más tendrán. Las T14 las compré con un número más, el 46, y aunque más holgadas, cuando llevo un tiempo con ellas y si además hay descensos por medio también me aprietan lo suyo y en la punta del pie veo las estrellas. Son las causantes del "desaguisado" en mis uñas de los dedos gordos. Bueno, realmente el culpable soy yo por elegirlas y hacer con ellas los 101 de Ronda.

Los trabucones en pequeñito

Con estos antecedentes no me quedaba otra que pedir un número más, el 47. Por eso las llamo las "trabucones". Las probé al día siguiente haciendo una ruta por carriles y el resultado no pudo ser mejor. para empezar: el pie va sin presión, y por delante tengo espacio de sobra, sin sentir el tope de la zapatilla al mínimo brinco. Además la sensación de ligereza que me transmiten es parecida a una zapa de asfalto. Los anteriores modelos eran más robustos, parecían menos flexibles. Incluso rodé un tramo por carretera con ellas y el tacto era perfecto. Sólo queda ver cómo van por terreno técnico, pero creo que no tendré problemas. En la estética también han cambiado mucho, ya que no siguen tanto la línea de sus antecesoras. En resumen, que estoy encantado con ellas, y espero que mis problemas de uñas se hayan terminado. Vamos, que me las miro puestas y no me parecen ni que sean tan grandes.

Con los nuevos trabucones estaba claro cual iba a ser el plan de la semana: trail a tope. De las cuatro salidas tres fueron por carriles, alternando calidad con distancia y recuperación, y otro día en asfalto metiendo algo de ritmo. La sesión de gimnasio también la cumplí y el quinto día de entreno lo sustituí con una salida por el campo con la family y unos amigos que también suma, ya que hicimos el recorrido del río Majaceite de ida y vuelta, de unos 10 kms, aunque lo mejor fue ver como se lo pasaron los enanos.

El resumen de la semana, previa al tapering para la prueba del Gato, fue éste:

  • Lunes 01/10: gimnasio tren inferior y superior. Seguimos metiendo más peso y con descansos reducidos  entre series.
  • Martes 02/10: trail de 14 kms por el Serrallo estrenando los trabucones volando a 4:47 y 151 ppm. Mejor no se puede empezar.
  • Miércoles 03/10: rodaje de fondo por ciudad en mi recorrido habitual de 13 kms a 4:58 y 146 ppm.
  • Jueves 04/10: trail nocturno por la campiña con Falín que aprovechamos para hacer una buena sesión de recuperación, sobre todo él con la maratón de montaña de Jaén tan reciente. Tranquilos 11 kms a 5:32 y 135 ppm. También "estrené" mis trabucones en charcos y fango, ya que las lluvias han dejado el terreno algo blando...grrr
  • Sábado 06/10: tirada larga trail por los carriles de Estella. De nuevo un ritmo más que bueno a 4:55 y 145 ppm en los 22 kms del recorrido, que sin ser duro tiene de todo. Buenas sensaciones tanto de piernas como de pies.
En total 60 kms en las cuatro salidas, pero sobre todo me quedo con lo que me transmiten las zapas y lo cómodo que me siento. Parece una tontería pero me ha costado dar con la tecla. También es verdad que el estado de forma acompaña, y aunque creo que estoy sobre el 80/85% llego bien a l carrera del sábado (no tanto como algunos dicen, pero bueno..).

Esta semana será de tapering relativo, ya que el sábado tengo la prueba de la Cueva del Gato. Son 45 kms con 1.600 mts de desnivel positivo acumulado en la que espero rendir a buen nivel. No voy a matarme, la verdad, mi objetivo real es Jarapalos, llegar allí al 100%, pero si me encuentro a gusto intentaré hacer un buen papel junto a los tres compañeros del club con los que compartiré la carrera. Además el fin de semana se presenta divertido, porque aprovechando la carrera me voy con la family desde el viernes a disfrutar de la sierra.

El recorrido y perfil de la prueba

Ayer lunes hice mi sesión de gimnasio, que aunque dudé volví a hacerla sin cargarme demasiado. Esta mañana he hecho mis 13 kms habituales a ritmo de 5 y mañana volveré a hacerlos para cerrar la semana antes de la carrera. El único contratiempo, aunque espero que se quede en nada, el dolor de garganta con el que me he levantado esta mañana. A ver como termina la cosa...

Para terminar, animar a la buena amiga Silvia que se está iniciando en esto del running, pero que se ande con cuidado que como se enganche ya no tiene remedio. Mucho ánimo.