Mis nuevas zapas

Viendo como he empezado el año y después de pensarlo mucho me he comprado un nuevo par de zapatillas. No son ni de asfalto ni de trail, técnicamente se hacen llamar "de estar en casa", del tipo pantuflas voladoras. Tienen interior acolchado y un tacón extra de amortiguación. El diseño también es de lo último, con cuadritos y solapa delantera.

Espero sacarles partido y hacerles muchos kms por casa, porque se han salido de presupuesto. En Wiggle estaban agotadas así que tuve que rascarme el bolsillo en el mercadillo de Estella este domingo, en el puesto "der Migué".

¿Un poco de humor no viene mal no?

Nuevo parón

Otra vez al dique seco. Hoy me he han hecho una pequeña operación  para quitarme de la nariz lo que inicialmente era un lunar pero al final era algo más serio. Aunque no de extrema gravedad había que quitarlo.
El resultado es que tengo que estar un par de días en reposo y al menos una semana después sin hacer ejercicio para evitar el sudor en la herida, ya que me han puesto algún punto.

Así que volveré a tirar de paciencia y a esperar, ahora que estaba reencontrando la forma. No sé si esto alterará mis planes de próximas carreras ya que el 10 de abril quería correr la media de Rota-Chipiona y voy a llegar corto de kms, como en la de Cádiz. Ya veremos.

Vaya año que llevo, pero bueno, me conformaré leyendo los entrenos y carreras de otros amigos run-blogeros, con los dientes largos...

Como un guante

A principios de año decidí comprarme un segundo par de zapatillas para acompañar a mis kayano y poder intercambiarlas o elegir entre ellas según lo que hiciera. Parece una tontería pero te da seguridad no depender de unas zapatillas, aunque sólo sea si se te mojan el día anterior.

Aunque al principio pensé en comprarme unas Saucony, que llevo tiempo detrás de ellas, me decidí por las Asics GT 2160. La saga 2100 de Asics ha sido la que he usado desde que me tomé esto un poco en serio. Tuve las 2120, 30 y 40 todas con muy buen resultado. De hecho, con ellas acabé con una periostitis que me traía de cabeza.

Lo que me terminó de convencer fue un artículo del blog de Albert Sampietro, Gadgets para correr, que sigo al día y recomiendo a todos. En éste hablaba muy bien de estas zapas ya que introducían una serie de mejoras (amortiguación y estabilidad sobre todo) que la distinguían de su predecesora la 2150. Así que me fui para Wiggle y allí las compré por unos 100 euros.

En menos de una semana ya las tenía aquí y ese mismo día las probé en un rodaje medio, no demasiado largo por si me salían rozaduras. Pero nada, como un guante desde la primera salida, al contrario que con las Kayano, que tardé como una semana en hacerles la horma.

Así que las recomiendo a los que tengáis unas características parecidas a las mías, o sea, pronador de unos 80 kilos y con unos 50 kms o más por semana. Son de gama medio-alta pero de verdad que no le envidian nada a las Kayano, supuestamente el tope de gama.

Semana a tope y Media de la Bahía de Cádiz

Después de los rodajes de la semana pasada, en los que empecé a encontrarme mejor, y sobre todo de la tirada medio larga del domingo decidí que intentaría ir a la media de Cádiz del día 20. Para eso tenía que hacer una semana completita de entrenos y probar aun más mis fuerzas.

Así que me apreté fuerte los cordones y salí el lunes, martes, jueves y viernes combinando kilometrajes largos con ritmos medios. Distancia y calidad dentro de mis posibilidades. Los rodajes fueron de 13, 10, 10 y otros 13 kms en esos días. Los ritmos medios también fui bajándolos de 5,15 a 4,55. Caña total.

El sábado estaba un poco cansado, no voy a negarlo, pero con mucha ilusión de volver a las carreras. Viendo cómo estaba mi plan era salir a 5,15 y aguantar a ese ritmo hasta el km 10. A partir de ahí, apretar o aflojar según estuviera. El calor y la autovía podían hacer estragos, y aunque he mejorado no he hecho más de 13 kms de una tirada. No sabía cómo iba a responder a partir del 15.

Y llegó el domingo, y todo lo planeado se fue al traste. Para empezar, me quedo dormido. Tenía que estar a las 7:45 en Cádiz para coger el autobús que nos llevaba a la salida en San fernando. Salí de casa a las 7:35 con un zumo y unos cereales saliéndome por las orejas. Cruzo los dedos porque no me llegue ninguna multa por velocidad en el tramo de autopista Jerez-Cádiz. Llego a las 8 en punto, cojo el último autobús y nos suelta en Bahía Sur para recoger el dorsal en una cola kilométrica.

Tardo más de media hora en llegar a mi turno de recogida. Nefasta organización: un mostrador con 3 chavales entregando los números como si fuera una tómbola. Después a otra mesa por el chip. Son las 9, por los altavoces avisan que se vayan acercando a la salida y yo poniéndome el dorsal, el chip y quitándome el chándal a la vez. A la desesperada entro en el servicio. No podía más, el stress me estaba matando.

Salgo corriendo del servicio, el corazón en un puño y unos de la organización me dicen que cruce el campo de fútbol hacia la salida que casi que "me están esperando". Les tiro la mochila (ni me dio tiempo a dejarla en el punto de entrega) bajo la promesa que me la llevan a Cádiz (cruzo los dedos otra vez) y hago un medio sprint para incorporarme a la cola del pelotón (eso fue mi calentamiento). Casi que no me da tiempo a parar y dan el pistoletazo. Para una vez que llego justito no nos hacen esperar, tiene tela esto.

Y por fin empieza la carrera, ahora a "descansar de tanto stress". El primer km de calentamiento y en cola del grupo lo hago a 5:26. Epiezo a coger ritmo y me veo muy bien, así que me animo y me pongo a 5 para adelantar gente y encontrar mi sitio. Pero pasan los kms y sigo adelantando. No he bajado el ritmo, más bien lo he subido algo, en torno a 4:50. Dudo un poco en bajar pero decido esperar a entrar en la autovía, que será más dura.

Llega la recta de la autovía y me engancho con Gustavo, el hermano de José Mari, que se estrena en las carreras nada menos que en la media. Va muy bien, con sus cascos y muy concentrado. Se viene conmigo un buen rato, casi hasta el final de la autovía. El viento no era de cara así que lejos de bajar el ritmo apreté un poco en algunos tramos, en torno a 4:40/4:45.

Entramos en Cádiz y ya estoy un poco tocado. Es la barrera de los 15 kms, la prueba de fuego. A partir de ahí toca apretar los dientes. Recupero algo de capacidad de sufrimiento y mantengo los ritmos en torno a 4:45. Los últimos 2 kms son puro sufrimiento: recta en subida, sol de frente y viento de cara.

Para colmo, la nefasta organización nos mete un km más. Encima que uno va con lo justito y con las condiciones que he contado, toma kilometrito de propina. La capacidad de sufrimiento se convierte en tortura, y llego con las últimas reservas. El tiempo, 1:48 que si le quito el km de regalo se queda en 1:43 largo. Inesperado totalmente. Muy satisfecho y muy reventado, pero mereció la pena.

Por último, tras mi botellita de agua y mi naranja (que no podía faltar) voy a por la camiseta de recuerdo. De nuevo la nefasta organización convierte el acto en una odisea en la que hay que emplearse a fondo con empujones y codazos. Lamentable.

Después me encontré con Alfonso que también estaba un poco perjudicado por la dureza de la carrera y rajando de la nefasta organización. Conclusión: mejor pagar algo por una inscripción (no sé si los 15 de la Rota-Chipiona) y tener mejores condiciones.

En resumen, vuelta a las carreras mucho mejor de lo pensado pero también con mucho sufrimiento. Pero de eso se trata, la recompensa y la satisfacción son mayores cuanto mayor es el esfuerzo. Probablemente me haya costado más hacer este tiempo que 10 minutos menos dentro de un par de meses en otra media. Ahora a descansar, que estoy reventado No sé si saldré mañana, aunque ya tengo mono...

Correr y competir

Cuando empecé a correr lo único que buscaba era hacer algo para estar en forma. Después pasa lo que todos sabemos: empiezas a progresar, te compras un pulsómetro, un gps, y empiezas a mirar los tiempos y ritmos que vas haciendo. Y entonces te planteas: habrá que apuntarse a una carrera, no? Acudes desubicado y nervioso, la corres con ansia y al final te vas a casa orgulloso del tiempo que has hecho y sobre todo de haberla terminado. Después de esa vendrán muchas más.

Bueno, esto más o menos es lo que yo viví y supongo que muchos runners populares de distinto nivel. A esto hay que unir que la mayoría tendemos a unirmos a clubes o grupos de amigos, con lo que acudir a las carreras se convierte casi en un acto social cada cierto tiempo en el que te reencuentras con compañeros de fatigas.

Para mí hacer carreras (competir suena un poco fuerte, la verdad) me ha servido sobre todo para motivarme y esforzarme corriendo, para conocer a mucha gente y para tener experiencias (buenas y malas) que me han ayudado a mejorar en todos los sentidos. Me ha ayudado a ponerme y superar retos.

Pero también reconozco que la competición no tiene que gustar a todo el mundo. Hay muchos runners que sólo quieren estirar las piernas y quemar algo de grasa. Mi gran amigo Bany es uno de esos, y respeto mucho su postura. No quieren presión, ni horarios de entrenos, y oir hablar de series o cambios de ritmo les horroriza.

Aunque no puedo decir que haya acudido a muchas, sí animo a todos a probar alguna carrerita algún día. Aunque sea una una milla urbana o una popular de 5 kms. En las carreras hay sitio para todos y muy buen ambiente. Y seguro que alguno se animará y volverá. Allí nos vemos!

Volviendo a la normalidad

Esta semana he vuelto a entrenar casi como siempre. Han sido cuatro salidas: lunes, jueves, viernes y domingo. He ido aumentando los kms cada día y también he intentado acelerar algo los ritmos consiguiendo unas medias aceptables, de casi 5 min/km.

El lunes hice 7.5 kms volviendo a coger por mi recorrido de siempre, la ronda Este y la avda. de Arcos. El jueves estuve por el parque González Hontoria y la pradera de Chapín haciendo 8 kms. El viernes alargué un poco hasta los 10 kms haciendo algunos cambios de ritmo a 4.45.

Hoy domingo tenía planeada una tirada medio/larga, en principio ir a las Beatillas y volver, para calibrar sensaciones en cuanto a distancia. Quedé con Antonio y al final cambiamos de recorrido para no coger carriles, ya que la lluvia nos lo iba a poner difícil. Me ha "llevado" de Hipercor a Guadalcacín, Mesas de Santa Rosa, parque empresarial y zona de Hipercor/Camino de Espera. Han sido 13 kms a unos 5.30 de media con lluvia intermitente. He aguantado bastante bien, aunque no con la soltura de hace tiempo, sufriendo algo en alguna cuestecilla que hemos pillado.

En general muy bien. Noto que estoy recuperando el tono más rápido de lo que pensaba, aunque uno quiere más y más. Me da la impresión que se pierde "capacidad de sufrimiento", eso que se adquiere con el paso de muchos kms, el aguantar y aguantar. Por eso calculo que hasta dentro de un mes no tendré una forma aceptable.

Para el domingo de la semana que viene estoy inscrito a la Media Maratón de la Bahía de Cádiz. Reconozco que me pilla un poco justito, ya que me haría falta al menos otra semana, pero tengo mucha ilusión de correrla, de ponerme de nuevo un dorsal. Esta semana intentaré machacarme un poquillo haciendo salidas de más kilometraje (de 10 para arriba) y llegar lo mejor posible para no sufrir demasiado. Me conformo con disfrutar de la distancia, sin buscar tiempos.

Todos hacemos running

Durante mi obligado y reciente parón tuve la oportunidad y el tiempo suficiente para blogear por muchas webs y sobre todo blogs de running. La verdad es que hace falta sólo un poco de tiempo para ir viendo blog tras blog, ya que de uno te lleva a otro por los enlaces, y así hasta cientos. Hasta aburrirte si quieres, vamos.

A pesar de todo sólo pude leer alguna entrada de la mayoría de ellos, pero suficiente para comprobar que cada uno vive el running de una forma, a cual más válida y respetable, y ese es el motivo de esta entrada.

Hay blogs casi profesionales, con publicidad, miles de visitas y entradas redactadas por auténticos especialistas. Hay otros sencillos, sin mucha elaboración ni casi fotos y en el que no funcionan los pocos enlaces que tienen. En algunos los protagonistas nos cuentan auténticos marcones, ritmos por debajo de 4 minutos y rodajes infernales. Otros se conforman con salidas ocasionales sin llevar gps ni pulsómetros, tan sólo admirar el paisaje. Nos cuentan anécdotas, crónicas rigurosas de carreras, planes y entrenos, incluso circunstancias personales de su vida más allá del running. Pero todos tienen en común la afición a este deporte.

Cada cual lo entiende y vive de una forma, y eso es lo que quiero defender. Desde el que mira las calorías que tiene el refresco que se va a tomar hasta el que se bebe tres cervezas después de un duro rodaje. No es mejor ni más válido el que termina en 1:15 una media del que ni siquiera se plantea el correrla. Eso sólo sirve para medir a los profesionales, a los que viven de esto.

Todavía me acuerdo de un comentario despectivo que escuché en la cola de recogida del trofeo de la ruta de Ecija: "qué hacéis en este sitio si vosotros habéis llegado en 2 horas quince por lo menos..." Se lo decía a un grupo de corredores despistados y recién llegados que todavía sudando se acercaron por el lugar equivocado. Vaya iluso.

Lo mejor de todo es que esto que estoy intentando expresar se vive en la realidad, y el compañerismo impera en la mayoría de las carreras o de las relaciones entre los runners. Pero debería ser mayor. El simple hecho de cruzarse con otro corredor debería acabar con un saludo entre ambos, cosa que ocurre muchas veces de todas formas.

También he querido aportar mi granito de arena desde mi blog, al que he cambiado algo el diseño para acoger muchos enlaces a blogs que he conocido y que me parecen interesantes, cada uno por diferentes razones. He creado una columna  a la izquierda para dejar a la originaria de la derecha sólo estos enlaces. La lista ni mucho menos es cerrada y la iré ampliando conforme conozca otros blogs que nos ayuden a tener diferentes visiones de este deporte que tanto nos gusta.

He tenido la suerte de conocer a algunos de estos run-blogeros, aunque no sea personalmente, y esto ya es un logro y de lo que estoy orgulloso. Es sólo el principio, y estoy seguro que seguiré ampliando estos amigos. Desde aquí animo a los que tengan su  blog a que se presenten y a aquellos que no lo tienen a que se animen a hacerlo. Todas las experiencias y opiniones nos interesan, porque todos hacemos running.

Semana casi en blanco

Espero que este año no siga igual, porque llevo una racha que no veas. El martes pillé un resfriado, seguramente contagiado por mi hijo pequeño, que el pobre lo ha cogido y pasado a casi todos en la familia. De todas formas la cosa ha quedado en eso, catarro y mal cuerpo, sin más complicaciones. Lo cierto es que he estado toda la semana intentando recuperarme...de nuevo.

Hoy sí estaba mucho mejor y viendo la mañana que hacía de buena temperatura me fui a rodar, que a este paso se me olvida dar zancadas. Hice casi 7 kms en 35 minutos a ritmo vivo que para mi estado actual es 5,15, con algún km a 5. He forzado un poco para ver hasta donde podía llegar y el resultado ha sido bueno, pero he sufrido un poco. Los problemas respiratorios han desaparecido, eso sí.

Espero poder coger el ritmo de salidas esta semana y hacer mínimo 4, aumentar los kms de los rodajes y hacer una tirada algo más larga el fin de semana.

Recuperando

Contando la salida del pasado lunes he hecho 4 rodajes hasta hoy. Aparte de la emoción del primer día por el simple hecho de ponerme las zapatillas y sentir de nuevo el asfalto, tras estos días y pasada ya una semana puedo decir que estoy en recuperación.

Las tres primeras salidas fueron al trote, casi sin mirar el reloj y sólo para ver la distancia recorrida. Así, hice entre 5 y 6 kms cada día y a unos ritmos entre 5.30 y 5.45 de media. Además, las espacié al menos en uno o dos días y saliendo con buena temperatura, temprano por la tarde. Las sensaciones en general buenas, aunque el segundo y tercer día sentí una especie de opresión en el pecho, en la zona del pulmón izquierdo donde tuve la neumonía, así que no forcé más y paré.

Dos días después volví a salir (ayer lunes, que era fiesta aquí, día de Andalucía), sobre todo para probarme de respiración. Afortunadamente parece haber casi desaparecido esa opresión que sentía aunque no totalmente. Supongo que es la falta de costumbre a respirar con más frecuencia al llevar ritmo de carrera. Como las agujetas de los pulmones, sobre todo siendo una zona que ha estado enferma.

Lo cierto es que ayer acabé muy animado, ya que pude llevar ritmos más normales para lo que estaba acostumbrado de 5 y algo, aunque no de forma constante. Además, aumenté la distancia a 7 kms y terminé muy entero. Muscularmente no tengo molestia alguna, por lo que "sólo" me falta recuperar el nivel aeróbico y empezar a meter kms. Esperaré de todas forma un par de días para volver a salir, que además está haciendo un frío que pela y no es cuestión de jugársela.

La verdad es que han sido muchos días parado y enfermo, pero es sorprendente cómo se puede llegar a perder la forma. Durante mis días de "reposo" estuve visitando muchos blogs y webs de running y me llamó la atención (más bien me alarmó) un supuesto estudio que decía que a partir de los 30 días sin hacer nada se perdía entre un 90-100% de la forma. Seguramente será exagerado, pero doy fe que un alto porcentaje se va al garete, aunque parezca mentira. En mi caso se agrava el problema al haber estado con una enfermedad respiratoria, y por eso creo que me costará más trabajo recuperar el nivel aeróbico. Sin embargo, tras una semana sin mucho esfuerzo sí estoy muy bien a nivel muscular. Apenas he tenido agujetas, tan sólo un dolor en las caderas y algo de gemelos, pero me duró muy poco.

Así que seguiré poco a poco, sin forzar demasiado y sin ponerme metas de momento. Me inscribí a la media de la Bahía de Cádiz para el próximo 20 de marzo pero no sé si llegaré. A competirla para hacer tiempo seguro que no, en todo caso (ojalá) a correrla y disfrutarla en plan entreno largo.

Por cierto, el domingo estuve viendo la media maratón de Jerez, que pasaba cerca de casa, para animar y sacar algunas fotos a mis compas del club y algunos amigos "locos que corren" como yo (alguno mucho mucho más loco). Fenomenal tiempo de Alfonso, que ya es el recordman del club (1h.30!!) y muy buenos también los de los hermanos Mariscal. José María en su primera media y Antonio que va a crear un nuevo sistema de entrenamiento: "correr menos y cada vez más rápido, pero sin parar de hacer de todo". También pude saludar y animar a Andy y algunos del Chiribitos y otros, como Jorge, Jesús, Juan Carlos, Antonio y corredores del club Fronter.

A ver si el año que viene puedo correr esta prueba "en casa", que por segundo año me quedo con las ganas de hacerlo, y si es con más gente del club mejor, que vaya racha estamos pasando.