lunes, 21 de febrero de 2011

38 días después

El 21 de enero fue mi último entrenamiento antes de empezar con la maldita gripe y todo lo que vino después. Fue un viernes en una noche fría. Hice 15 kms de entreno largo a ritmo rápido dentro de mi "extinguido" plan de maratón. Salí sin ganas, con mal cuerpo y llegué aun peor. Esa noche ya me acosté con fiebre.

Hoy, 21 de febrero, me volví a poner mis Kayano. Me abrigué bien, aunque no hacía mucho frío a las 6 de la tarde, y después de unos estiramientos algo más largos ý concienzudos de lo normal me coloqué mis "bártulos": el GPS (que seguía con batería!), mi Ipod, los cascos y las llaves de casa.

Sonrisa de oreja a oreja, algo de reprobación de mi mujer (lógico después de lo que he/hemos pasado) y a trotar. La primera sensación fue de libertad, de volver a hacer algo que me gusta y de querer pegarme un sprint. A pesar de eso intento mantener un ritmo lo más cómodo posible: miro el reloj y voy a 6:15 el km! Qué barbaridad. Bueno, decido no mirar mucho el reloj para no deprimirme y dedicarme a disfrutar y correr por sensaciones.

Va pasando el tiempo y muscularmente no tengo apenas molestias. Ni siquiera voy cargado de piernas, aunque voy a ritmo bajo. Vuelvo a mirar el gps y sin querer el ritmo ha ido aumentando a 5:40. De respiración no me encuentro mal (tampoco sobrado, la verdad), ya que no voy "ahogado" ni con tos (es lo que me temía). Algo forzado tan solo.

Al final hice 5,5 kms desde casa hasta Chapín, de ahí al parque González Hontoria y vuelta por la avda. de Europa. A partir del cuarto km empecé a sudar más de lo habitual pero las piernas iban más sueltas. Sin embargo, las pulsaciones y la respiración sí estaban por encima de lo normal.

Al final he hecho 30 minutillos que me han sabido a gloria. Mucho por mejorar a nivel aeróbico pero nada mal de tono muscular. Ahora aquí sentado después de la ducha sí estoy algo cansado pero sin secuelas pulmonares, que es lo que me preocupaba.

Gran día para mí que he querido compartir con los que me seguís. Ahora un buen plato de pasta, a descansar y a pensar en la próxima salida, que será después de uno o dos días de descanso. Lo que me vaya pidiendo el cuerpo, ya que no quiero ponerme fechas ni obligaciones.

domingo, 20 de febrero de 2011

Luz al final del túnel

El jueves pasado me reincorporé al trabajo después de casi un mes de baja (la primera de mi historia laboral, todo sea dicho) y ya estoy intentando coger el ritmo de una "vida normal", esa que no sabemos apreciar en el día a día hasta que nos ocurre algo y la vemos desde lejos en una cama o recostado en el sofá.

Estos primeros días han sido duros, sobre todo por el tema físico, ya que estoy desacostumbrado y algo débil, así que también empecé a tomar ayer unas cápsulas de vitaminas que me han recomendado (yo y mis pastillitas, verdad Quique?). Respecto a mi enfermedad creo que estoy recuperado al 95%, ya que de respiración estoy bien y tan solo tengo algo de tos.

Y hoy he salido a andar. Después de la total inactividad es un logro y una sensación que echaba de menos, ya que he estado 45 minutos a ritmo de zancada larga (bueno, que no he ido a pasear). Lo que se dice andar rápido, para probarme, y me he sentido bien en general. Algo cansado muscularmente pero bien a nivel aeróbico, sin ahogarme.

Escribir esto me parece mentira. Por un lado, por todos los kilómetros que llevo en las piernas y por otro por tantos días en el dique seco. Bueno, pero poco a poco estoy llegando a esa normalidad tan deseada, y ya estoy pensando en ponerme las zapatillas. Muy pronto...

martes, 15 de febrero de 2011

Y aquí sigo...

Al final la bronquitis no era tal, sino lo diagnosticado en principio: una fuerte gripe que derivó en una neumonía, que aunque no ha sido grave sí lenta y fastidiosa de quitar. De hecho, llevo 32 días desde que empecé con esto, 16 días de antibióticos y aun sigo con tos y ruiditos en el pecho.

De todas formas hoy he estado en el neumólogo y me ha dicho que está en "fase de resolución", por lo que espero que en esta misma semana me reincorpore al trabajo y quizás la próxima pueda empezar a "estirar las piernas".

La entrada de hoy no tiene nada que ver con la que tuvo que haber sido, ya que me hubiera gustado llamarla "Lo conseguí" o "Reto superado", por decir algún tópico. Y es que ayer fue el día que estuve soñando todo este año pasado de entrenos, la maratón de Sevilla. Estuve todo el fin de semana pensando en la carrera, y más cuando me llegó el viernes un sms anunciándome que podía recoger mi dorsal (el 1881, qué bonito joder) en la puerta X del estadio olímpico. Me conformé poniéndome los dientes largos visitando webs y blogs de amigos o conocidos que iban a participar y dándoles ánimos para la carrera. Y el domingo no paré de mirar el reloj pensando por donde iría en cada momento, si ya me acompañaría Quique o si el del mazo estaba a mi lado...

En fin, esto también me ha servido para comprobar que no todas las cosas se pueden controlar (me lo temía), y que cuando no puede ser no puede ser. Creo que la experiencia me ha curtido en el aspecto negativo, en tener que enfrentarme a no poder superar retos, por más que creyera que estaba preparado para hacerlo.

Y como hay que pasar página y mirar para delante, ya estoy deseando volver a empezar a prepararme para el año que viene, con más ganas e ilusión todavía. Además cuento con que iré acompañado de buenos amigos runners del DBM: Antonio el triglobero (2012 es nuestro año), Quique (ya con su doctorado), Alfonso (ya no tienes excusa) y a ver si alguno más se anima.

Así que como decía al principio, que aquí sigo, aunque parece que por fin empieza a aparecer algo de luz y voy a poder asomar la cabeza.

domingo, 6 de febrero de 2011

Parada en seco

Han pasado bastantes días desde la última vez que escribí en el blog, pero no tenía demasiadas cosas que contar, o más bien ninguna buena. Del punto muerto he pasado al parón total.

Resumidamente cogí una gripe de las buenas (no me han terminado de decir la letra, pero de la A a la Z cualquiera) y ésta se complicó bastante afectándome a los pulmones. En principio, tras unas radiografías me diagnosticaron neumonía, y al ver que no evolucionaba con unos antibióticos de los fuertes (8 días tomándolos) me mandaron al hospital, a urgencias. Me temía lo peor, pero al final me dicen que de neumonía na de na, que es una bronquitis aguda!! Me cambiaron el tratamiento por un inhalador y a esperar.

Eso fue el viernes, y la verdad es que en dos días estoy algo mejor. Al menos no tengo tanta tos, porque llevo 3 semanas "haciendo abdominales" sin parar. También estoy algo más animado (por eso escribo), aunque me canso con cualquier cosa que hago.

Lo cierto es que llevo más de 3 semanas en el dique seco, y me he despedido, con todo el dolor de mi corazón, de la ilusión y el reto de este año, correr mi primera maratón. Han sido muchos esfuerzos y sacrificios pensando en el próximo 13 de febrero y no poder correr me ha dejado un poco tocado, no puedo negarlo.

En principio, si todo va bien, espero que en un par de semanas pueda volver a salir. No sé cuanto tardaré en coger la forma, pero la media de Jerez también la doy por cancelada. No voy a arriesgar nada, ya me han dicho los médicos que no juegue con esto. Quizás la media de la Bahía de Cádiz el 20 de marzo sea una buena fecha (eso espero, porque más sería desesperante).

Así que nada, que estoy vivo y que resurgiré con más fuerza que nunca. Iré limpiando las zapas, cargando el pequeño reloj de pared que llevo en la muñeca y enfriando los isotónicos para mi vuelta.

Por último, daros las gracias a todos los que me estáis animando en estos momentos. A los más cercanos (MA y family), a los compañeros del club y a todos los que aun no conociéndonos en persona se que estáis ahí por vuestros mensajes.