martes, 31 de diciembre de 2013

Adios al 2013... un año difícil

Mi 2013 ha sido un año complicado, muy largo y con poco que contar en cuanto a running. La lesión ha ocupado todo mi tiempo y dedicación. Habitualmente esta entrada de final de año la dedicaba a hacer un resumen de las carreras que había hecho, los kms recorridos, etc. Esta vez tan solo lo haré para recordarme que aunque difícil, ha sido un año de esfuerzo, y como tal, habrá merecido la pena. Esto del correr no sólo es ponerse las zapatillas y salir a entrenar o competir, también es recuperarse y luchar contra las lesiones, y ahí me he doctorado.


Es sólo cuestión del calendario, de cambiar unos números, pero a ver si el 2014 es un año de cambios positivos, de bienestar y sobre todo de mejoría. Para todos y respecto a todo en general, que falta hace, y claro, para mí también.

He escrito poco, me he comunicado poco con mis amigos los blogers, pero desde aquí os deseo a todos que 2014 sea un año en el que podamos seguir contando historias. Que hemos superado otro reto, que disfrutamos corriendo o que simplemente estamos vivos.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Sigo dando pasos

Parecía que todo estaba hecho, que la pubalgia estaba curada, pero yo sabía que no era así. En mi última entrada ya fui bastante cauto porque sentía que no todo estaba bien. Mucho mejor, pero no al cien por cien. Mis ejercicios estaban dando sus frutos y las molestias casi habían desaparecido pero al correr no iba cómodo.

Aconsejado por mi fisio Silvia contacté con Rubén, un preparador físico, y me puse en sus manos. Me apunté también al gimnasio donde trabaja para poder estar más cerca. Desde entonces llevo dos meses realizando unas tablas de ejercicios que me ha diseñado a medida que incluyen musculación, elongación, potenciación y movilidad de toda la zona pélvica, lumbar y piernas en general.

La mejoría en el primer mes fue importante y empecé a rodar al terminar cada sesión unos veinte minutos en la cinta del gimnasio. Después también volví a a rodar suave en asfalto con buenas sensaciones. Terminaba algo cargado en aductor y cadera derecha pero con descanso y fisio me recuperaba.

Todo iba sobre ruedas, y el 1 de diciembre decidí inscribirme a una carrera. Fue un acto simbólico, ya que justo un año antes hicimos la Trail Pirata y fue la última vez que me puse un dorsal, ya lesionado aunque sin saber el alcance. Sabía que no era lo más adecuado pero quise hacerlo como una forma de reaparecer, de empezar a creérmelo, y más con casi todos mis compañeros y amigos del club que también estaban inscritos.

Fueron 9 kms que para mi estado resultaron demasiado duros. La carrera en sí la llevé bastante bien, acompañado de Paco y Antonio, pero a un ritmo demasiado alto, sobre los 5' el km en terreno arenoso y con cuestas, ya que era un cross. Pulsaciones altas y un último km muy largo, lo normal en estas situaciones, pero no terminé "desfondado ni medio cojo".

Lo malo vino después, ya que las molestias sí fueron fuertes en psoas y aductores. No estaba acostumbrado ni al ritmo, ni al terreno, ni al desnivel. Incluso creí que los dolores me afectaban al pubis apareciendo muchos fantasmas en mi cabeza. Mi recaida fue casi más psicológica que física.

De nuevo en manos de la fisio he tenido que recuperar lo perdido dejando de correr ni siquiera en la cinta y limitándome al gimnasio. Ahora la cosa de nuevo está mejor, en esta semana me he estado probando muy suave y las sensaciones son buenas. Eso sí, continúan las sobrecargas en aductor y psoas derecho. Próxima semana nueva revisión de plantillas, y ya es la cuarta.

Resumiendo, que no acabo del todo con la maldita lesión. El dolor en el pubis ha desaparecido, eso es lo mejor, y noto que recupero el tono poco a poco, pero también sé que no puedo descuidarme ni confiarme. Seguiremos insistiendo. Ya me queda menos.

jueves, 24 de octubre de 2013

Mi reto de correr

Nunca tuvo tanto significado el título de mi blog. Cuando correr deja de ser algo normal, no sólo como actividad deportiva regular sino como una mera forma de desplazarse, se convierte en un reto. Esa es la sensación que he tenido en estos meses con mi lesión, y que tanto trabajo me está costando superar.

Hace mucho que no escribo, y no porque me haya desanimado o abandonado. Ni siquiera esto tiene una explicación clara. Simplemente me relajé. Llegó un momento en que no avanzaba y decidí no presionarme en nada relacionado con correr. Una de ellas fue el blog. Así de fácil. Dejé de entrar en las páginas de los amigos y de contar los días sin poner alguna entrada en el mío. Cuando tuviera algo distinto que contar, bueno o malo, lo haría. Si tuviera ganas.  Y bueno, aquí estoy.

He avanzado mucho. No he parado de hacer ejercicios, he cambiado otra vez de fisio, he seguido con mi bici de montaña y hasta he contactado con un preparador físico. El resultado es que el pubis ya casi no molesta, aunque en la zona de la cadera derecha tengo algo de dolor. Me dicen que puede ser trocanteritis y me lo están intentando corregir con las plantillas.

Los avances son muy lentos pero en estos meses sí son muy perceptibles. He comenzado a "medio correr" en intervalos de correr y andar. Ya estoy haciendo unos 8 kms y no termino muy mal, aunque con esas molestias que antes decía. Por eso no me atrevo a decir que "estoy curado". El miedo a recaer está ahí y no quiero pasarme de optimista. Han sido 10 meses con muchos momentos que en otra entrada sí quiero explicar. He pasado por varias fases y reconocerlas creo que puede ayudarme en el futuro y a los que por desgracia se topen con una lesión de este tipo.

Ahora estoy inmerso en la II Trail Pirata Sierra San Cristóbal, la carrera de nuestro club, que organizamos por segundo año aunque esta vez "por derecho", con todos los permisos, seguros y autorizaciones del mundo mundial. Las inscripciones, a pesar de aumentarlas de 300 a 350, se nos agotaron 40 días antes de la prueba que es el 10 de noviembre. Estamos trabajando mucho y muy duro, y espero que todo salga en esa línea. No podemos defraudar.

Por último pediros perdón a tantos amigos a los que he dejado en stand by, aunque no os he olvidado. Muchos me han mostrado su interés por otros medios, pero sé que todos habéis estado ahí. Al igual que tantos con los que me veo y que me soportan. Espero poder daros la tabarra otra vez.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Sigo avanzando

Tras seis meses de pura lesión sigo en la brecha. Ya no hay plazos, no hay presión, no hay forma física, pero sí hay esperanza. En el último mes he tenido algunos avances que hacen que piense que estoy en el camino.

El principal es que he cambiado de fisio y ahora es Selu de Beiman el que me trata. La verdad es que con la chica que me trataba hasta ahora habíamos llegado a una especie de bloqueo y a pesar de sus esfuerzos, que han sido muchos, no se avanzaba. Selu ha conseguido aislar y rebajar la lesión dándome muchas ilusiones. Sin embargo, pese a que en las dos sesiones iniciales todo se centraba en el psoas, después ha ido "moviéndose" a los estabilizadores de la cadera y a la inserción del recto anterior del abdomen. Parece que se ataca una zona y vuelven las molestias a otra, por lo que están buscando la causa principal, que parece que podría ser la pisada.

Así que la semana pasada me puse en manos de un podólogo especialista con mucho prestigio por aquí, Miguel Saldaña. Me ha hecho el estudio de la pisada y me ha dado algunas explicaciones que me han convencido bastante. La pronación no es algo genérico que se pueda curar con unas zapatillas y ya está. Probablemente esté arrastrando carencias en la pisada que se han ido acentuando con la acumulación de kms y se han ido hacia arriba al fortalecer las piernas. Lo cierto es que en dos semanas tendré mis plantillas.

Sigo con los ejercicios diarios que ahora son casi todo estiramientos, y muy centrados en psoas y aductores. También he tenido una toma de contacto con la EPI, que es una técnica que se utiliza en problemas de tendonipatías con buenos resultados. Básicamente consiste en dar unas descargas eléctricas con una aguja en la zona afectada para "destruirla" y que se regenere. En principio debe hacerse cuando tenga más localizada la lesión, por lo que seguramente volveré a enfrentarme con ella en más de una sesión "divertida".

Y también he seguido saliendo con la bici de montaña. Está siendo mi vía de escape. Aunque sólo una vez en semana me sirve para tener contacto con el exterior y con el mundillo runner y para evadirme un poco. No suple en absoluto a correr ni mejora mucho la forma física pero es lo que hay. Espero seguir contando buenas noticias en breve.

jueves, 9 de mayo de 2013

101 de Ronda...algo especial

El próximo sábado se corren los 101 kms de Ronda, prueba que el año pasado tuve la suerte de disfrutar y también de sufrir. Conocí lo que algunos llaman "el lado oscuro", que me cambió muchos conceptos y hasta mi forma de pensar. Es difícil describir las sensaciones y todas las experiencias que se viven en esa prueba. Los que hemos tenido la suerte de hacerla sabemos de lo que hablamos. Cuando te encuentras con alguien que te dice que es "cientounero" basta con mirarle a los ojos para entenderle. Sobran las palabras.

Este año era mi fecha clave. Desde el día siguiente a terminarla, en el que sufrí tanto con el pie, tuve claro que habría que repetirla. Mis grandes amigos Falín y Jose también. En diciembre conseguimos inscribirnos todos. Fueron casi dos horas clickeando el ratón sin parar hasta conseguir los seis dorsales, ya que también se animaron David, Sergio y Jesule. Para mí era un día importante. Cuando me lesioné hace ya más de cinco meses ni se me pasaba por la cabeza no asistir. Pero fue pasando el tiempo y a pesar del esfuerzo vi que no había manera. Ni siquiera para hacerla andando como se me pasó por la cabeza cuando no había posibilidad de entrenar. Cuando cedí el dorsal hace más de un mes al bueno de Iván reconozco que fue un momento muy triste, aunque también de liberación. Había estado mucho tiempo presionándome pensando en los 101.

Hoy sigo ilusionado con el sábado 11 de mayo a las 11 de la mañana en ese campo de fútbol abarrotado de valientes con muchos kms en sus piernas deseando de iniciar una  aventura que casi nadie sabe cómo terminará. Mis amigos y piratas estarán allí, y saben que yo estaré con ellos. Jose, Falín, David, Jesule, Iván. Cada uno con su reto y objetivo, pero todos con la ilusión de llegar a la Alameda, de día o de noche, corriendo o andando, y colgarse ese ladrillo que tanto valor tiene. Tampoco me quiero olvidar de Sergio, Inma y Ginés que este fin de semana compiten en un importante raid por equipos en Alhama (Almería). Toda la suerte del mundo para vosotros y también para otros amigos blogueros como Daniel, Manuel o Javier "Pundonó". Y por supuesto para todos los amigos del Maratón Jerez con Juanlu a la cabeza así como al grande de Andrés. Os tendré todo el día en la cabeza.

El año que viene estaré allí.

jueves, 25 de abril de 2013

Un largo camino...

La pubalgia y yo ya vamos para cinco meses juntos, y eso que no me gusta su compañía. Sigo en la lucha, no me he dado por vencido ni lo haré. He hecho y probado todo lo que me han recomendado y seguiré haciéndolo. He sufrido y padecido esta situación de paro deportivo, sobre todo mentalmente, pero también he aprendido a convivir con ello y a sobreponerme. Me ha costado, pero una vez encajado el golpe y sabiendo que el camino será largo he terminado aceptándolo.

Esta lesión tiene tela de guasa. La evolución es como "la hoja de un serrucho". Hay días en que pienso que casi estoy recuperado y otros en que esto se hará crónico. Ahí está la clave, en no desmoronarse y seguir por el camino.

He convertido mi recuperación en un plan autodidacta, sacando lo que considero que me beneficia y quitando las cosas que no me han aportado demasiado. Mantengo los ejercicios a diario en una tabla que he hecho a mi medida, con más estiramientos y menos abdominales. He reducido las sesiones de fisioterapia, primero porque en la compañía de seguros ya me han puesto problemas, pero sobre todo porque no veo que sean indispensables. He quitado la piscina ya que no me hacía mejorar sino al contrario, además de no cuadrarme nada en mis horarios. Sigo con los masajes Tui-na una vez en semana, que creo que sí me están beneficiando.

La novedad más importante es que he empezado a hacer bici de montaña. Lo he probado y al menos parece que no me perjudica. No he salido todavía muchas veces pero incluso creo que veo mejorías al mover las piernas. Y por supuesto, me servirá o para recuperar algo de forma o para que no caiga más. Es la vía de escape que he encontrado y que mantendré como complemento para cuando vuelva a correr.

La sensación en general es que he mejorado. La molestia en el pubis es ahora al realizar apoyos y giros bruscos, un pinchazo en la zona. No es el dolor de fondo anterior. Los aductores y zona pélvica también tienen más movilidad aunque persiste algo el bloqueo, sobre todo en la parte derecha. Puede ser que esté volviendo atrás, al principio de la lesión. Espero que sea así y que pueda localizarla y acabar con ella. Todo hace indicar que parte de la zona lumbar y se ha ido dirigiendo hacia abajo en la cadera produciendo la descompensación y luego la osteopatía de pubis.

Lo cierto es que el camino hasta ahora ha sido largo y no tengo claro si lo que me queda es mucho o poco. Por lo pronto me monto en la bici a ver si se me hace más corto. Siento no estar más cerca de vuestros blogs ya que aunque os leo de vez en cuando me he relajado un poco. Y por cierto, mucha suerte en Mapoma a muchos de vosotros...

miércoles, 27 de marzo de 2013

Algunos cambios

Mis entradas cada vez son más espaciadas, pero no hay ninguna novedad importante y no me gusta el auto machaque ni la compasión general. Sigo en el mundillo runner, leo y participo en lo que puedo, y mis amigos también siguen encima mía, cosa que les agradezco, pero como uno más del grupo. Ser pirata es lo que tiene...compañerismo por encima de todo.

En el tratamiento han habido algunos cambios: he tenido un par de visitas más a la traumatóloga con radiografía y telemetría de la pelvis incluidas. Han confirmado el diagnóstico de la osteopatía de pubis y se ha descartado problema biomecánico relacionado con cadera o fémur. En cuanto al plan de trabajo hasta la semana pasada fue igual de intensivo, pero ahora me han recomendado un par de semanas de "descanso". No haré fisioterapia, no iré a piscina y he reducido la tabla de ejercicios. Sólo estoy haciendo los estiramientos, por lo que la sesión de una hora se reduce a media y no cargo tanto los abdominales.

Otro cambio bastante importante es que he empezado a ir a un terapeuta que hace técnica de masaje Tui-na. Ya os contaré en su momento más de estas técnicas de masaje chino con más de 2000 años de antigüedad. De momento llevo dos sesiones y Gabi, que así se llama, es bastante optimista (demasiado diría yo). Está haciendo todo lo posible para que llegue mi recuperación, añadiendo a las dos horas de sesión de masaje y estiramientos unas bandas de kinesio y también Auricupuntura. Era algo escéptico con estos temas pero "para ganar hay que creer", y voy a hacerlo. Todo sea por la causa.

Por otro lado no dejo de estar al tanto de carreras y entrenos de todos. Tuve la suerte de "compartir y contar" la hazaña que Jose hizo en el Ultra Trail Bandoleros, con unas condiciones dantescas acabando en 24 horas y el puesto 13 de los 300 que salieron y tan solo 114 finalizaron. Una bestialidad al alcance de pocos, algo de lo que estamos orgullosos sus amigos.

Hoy también se ha producido un hecho muy importante para mí: he cedido mi dorsal para los 101 kms de Ronda. La decisión de no correrla ya estaba tomada hace tiempo, aunque ahora es más que lógica, y la persona que lo llevará estoy seguro que lo hará muy dignamente. No tanto por el resultado que haga, que también será bueno, sino porque lo disfrutará como yo lo hubiera hecho. Será un pirata y llevará parte de mí con él.

¿Cómo estoy? Prefiero ser conservador y decir que "no estoy peor". Es complicado observar progresos y una evolución clara, aunque en general creo que voy para adelante. En estas próximas semanas podré sacar más conclusiones. Lo que sí he ganado es algo de confianza a base de ir quitándome presión. La pérdida de forma y no tener un horizonte marcado han dejado de ser mi principal preocupación y obsesión. Sé que saldré antes o después y lo que estoy aprendiendo es a ver las cosas de forma diferente. He empezado a sumar en lugar de restar con esta situación y me está haciendo más fuerte. De todo se aprende.

domingo, 3 de marzo de 2013

Poco que contar y mucho que ver

Pues eso, que no tengo muchas noticias que dar. Sigo con el mismo plan de fisio, ejercicios, piscina y medicamentos. Sigo sin perdonar ni un día. Sigo viendo el tiempo pasar, y a veces lo hace muy lento. La lesión sigue estando ahí, y aunque parece más localizada  cualquier gesto o movimiento de carrera o paso largo me hace recordar que las molestias en el pubis no desaparecen. Tengo visita al traumatólogo en dos semanas y a partir de ahí ya veremos.

No quiero empezar a impacientarme pero la indefinición es lo más duro de afrontar. No es cuestión de mucho o poco tiempo, eso es relativo, sino de cuánto. Hablarme ahora de semanas es insignificante, incluso de meses. El problema es no saber cuándo empezaré a ver algo de luz. Bueno, me he desahogado un poco, pero no pienso desistir. Sigo y seguiré en la lucha.

Esto me está sirviendo para  darme cuenta de lo poco que se valora el bienestar y los buenos momentos. Sólo hablando de running, echo tanto de menos aquellos rodajes suaves por la campiña viendo atardecer, las salidas por la sierra de fin de semana  o incluso los trotes cochineros por la ronda este. Me preguntaban hace poco por volver a competir y pensaba que me conformaría sólo con rodar y echar un buen rato con mis amigos.

Mientras, os sigo a todos en vuestros blogs y redes sociales. Más que para ponerme peor me sirve para no perder contacto y seguir unido al mundillo, aunque es verdad que los amigos no dejan de animarme y contar conmigo. Me alegro que casi todos hayáis conseguido vuestros logros en la maratón de Sevilla, desde los más ambiciosos a los menos. Sólo prepararse y participar en la prueba tiene todo el mérito. Mucho ánimo, Paco. También sigo a los que estáis en plena preparación de Barcelona y Madrid, a Manuel Robaina y su Transgrancanaria, a Andrés y el UT Les Fonts, a Antonio y su Ironman de Frarnkfurt, y a tantos otros.

Además quiero hacer mención especial a mis amigos y compañeros de club, los piratas. A todos ellos por seguir ahí día tras día, preocupándose y contagiándome su buen rollo. A Iván para que vuelva pronto después de su percance en la última carrera, que tiene muchos trofeos y medallas que ganar. A Falín, por todo... Y por supuesto a José María, que el próximo fin de semana se enfrenta a una de las pruebas ultras más duras del panorama nacional, el Ultra Trail Bandoleros. Serán 146 kms y casi 11.000 metros de desnivel acumulado, pero apuesto por él. Mucha suerte, amigo, eres un fuera de serie.

martes, 19 de febrero de 2013

No parece que fue ayer...

Hoy hace exactamente un año de la maratón de Sevilla de 2012.  Fue mi primera carrera "larga" a la que llegué muy preparado y que disfruté mucho. Estaba fino y conseguí mi objetivo. Todo me salió bien. Después vendrían muchas más en mi año "ultra", pero esa carrera me dejó marcado y supuso un cambio en mí como corredor.


El típico dicho de que el tiempo pasa volando en mi caso no ha sido así. Hoy mi estado físico no tiene nada que ver con el de aquel día y mi objetivo es mucho menos ambicioso que bajar de las 3h30. Pero es que además en este tiempo han pasado tantas cosas y he tenido tantas experiencias que me parece mentira que sólo haya pasado un año, 52 semanas.

Esta entrada es para tener un recuerdo en un día importante para mí pero también para desear suerte a tantos amigos que el próximo domingo tendrán la suerte de disfrutar de esos 42 kilómetros por las calles de Sevilla. A todos ellos... Jesule, Paco, Álvaro, Juan Barroso, Antonio M-B, Óscar, Miguel, Ángel Luis, Javier R. "Espíritu", Javier "Unyko", Javier "Pundonó"... y tantos otros conocidos...mucha suerte y aprovechad el momento. Ya casi habéis conseguido lo más difícil en la maratón: colocarse en la línea de salida. Correrla y cruzar la meta es el premio a vuestro esfuerzo. A por ella!

sábado, 16 de febrero de 2013

Las causas de la / mi pubalgia

He leído mucho sobre la osteitis de pubis o pubalgia últimamente. Muchas visitas a páginas de medicina, deportivas, foros de opiniones, blogs particulares, etc. Mucha información en distintos sentidos, algunos no muy positivos, pero que me han ido aclarando el alcance de esta lesión y su dificultad, no sólo en su recuperación, sino en el diagnóstico y la identificación de las causas.


De lo mucho que he visto algunas de las descripciones teóricas sobre las causas de la pubalgia son las siguientes:
Factores intrínsecos: Acortamiento de los miembros inferiores, displasia de cadera, hiperlordosis lumbar, espondilolisis, deficiencias de la pared abdominal.
Factores extractos: Mala calidad del terreno deportivo (resbaladizo o pesado), sobreentrenamiento, mala programación del entrenamiento, mala realización del calentamiento y estiramiento deportivo.

Otra más breve y resumida:
La pubalgia tiene como causa más frecuente un desequilibrio entre los músculos oblicuos insuficientes y los músculos aductores hipertonificados.

Algunas tras relacionadas con el fútbol pero que se pueden aplicar también al running:
Entre las posibles causas que dan lugar a una pubalgia se encuentran el sobreesfuerzo en el abdomen y aductores o el golpeo al balón al realizar centros o disparos a puerta, estos gestos pueden provocar una descompensación entre dichos músculos o una sobrecarga en los mismos que deriven en la pubalgia.
La disputa de un número demasiado elevado de partidos o entrenamientos sin el necesario descanso puede conllevar una lesión de este tipo. Igualmente, el cambio frecuente de superficies de juego (pasar de terrenos blandos a duros o viceversa) o una mala preparación física puede causar este problema.
Por último, una caída brusca sobre los pies (como al realizar un salto y ser descompensado en el aire) o la realización de gestos técnicos defectuosos o forzados podría llegar a provocar una pubalgia. 

Todo esto es la teoría. Si analizo mi experiencia sí puedo llegar a algunas conclusiones, aunque hasta que no termine de recuperarme serán provisionales, ya que conforme avanzo en ella descubro nuevas cosas:

  • Factores intrínsecos o biomecánicos: no tengo pruebas médicas que apunten a esta causa y los otros factores sí parecen más relacionados. En cualquier caso los pronadores tenemos más probabilidades de caer en esta lesión según he leído. De todas formas no descarto alguna prueba de caderas. 
  • La calidad del terreno deportivo está claro que influye negativamente. No es lo mismo correr por una calzada que por una pendiente llena de piedras e ir dando saltos.
  • Los entrenamientos. Por supuesto que han sido muchos, de mucha distancia y sobre todo, duros. Pero no puedo decir que me sintiera sobreentrenado. Al introducir este año el gimnasio me sentía más fuerte de piernas y lo he notado. 
  • Estiramientos: soy de los que no perdonan ni uno. Antes de correr y sobre todo después. Siempre los he hecho, y por supuesto incluyendo los aductores. Que no eran suficientes o mal ejecutados tampoco lo creo. De todas formas es algo a reforzar, ya que nunca sobran.
  • Abdominales: aquí sí creo que puede haber algo. Los he hecho, y muchos, casi después de todos los  entrenamientos. El problema es que los he realizado a la antigua, o como nos han enseñado a todos, tirando de piernas para los superiores o levantándolas para los inferiores. Esa forma de hacerlos provoca que usemos mucho el psoas y la zona pélvica, por lo que se contribuye a cargarla aun más. Hacía tiempo que notaba las molestias al hacer los inferiores sobre todo pero yo seguía y seguía. La rotura de fibras inicial del oblicuo puede responder a esto.
  • Mala programación: puede ser. He hecho pruebas duras todo el año y no he descansado "de verdad" casi nada, pero sin embargo he repartido esa carga a lo largo de los meses y no me he sentido mal. Pero eso fue así hasta octubre. A partir de esa fecha, justo después de la carrera del Gato en la que llegué muy reventado a meta con calambres no paré lo necesario. Al mes y medio tenía Jarapalos y para prepararlo hice varias salidas seguidas con mucha distancia y desnivel. Arcos, Pinsapar, Albarracín, y de la última al Puerto del Boyar ya salí resentido. Antes de Jarapalos el dolor en el pubis ya estaba apareciendo y probablemente en la carrera terminé de romperme.


Todo esto son conjeturas. La razón principal, por correr, claro. Y correr mucho por desniveles, pues peor. Y no descansar, también. Pero son razones simples y no suficientes. No todos los que hacen montaña o ultras caen con una osteopatía de pubis. El factor suerte también influye. Yo he jugado mis cartas, y aunque me he machacado mucho también he sido meticuloso con los entrenos, estiramientos, abdominales, masajes, etc. Pero me ha tocado. Lo que quiero es sacar conclusiones para que no me vuelva a ocurrir, más que para culparme o pedirme explicaciones.

Mientras le doy al coco, que ahora tengo tiempo y mucho para hacerlo, sigo con la recuperación. El plan de trabajo que ya os expliqué con fisio, ejercicios, piscina y medicamentos. He añadido algunas cosas y no he perdido ni un día. Está siendo duro. Casi le dedico más tiempo ahora que cuando entrenaba.

Mi estado en resumen diría que no ha empeorado. Estoy mejor que hace dos meses y medio cuando me lesioné y que hace un mes cuando empecé el tratamiento específico de la pubalgia. Pero las molestias no desaparecen del todo. Cada vez más aisladas, en una zona concreta, en la parte abdominal baja. El trabajo se está notando. El próximo miércoles tengo nueva cita con el traumatólogo. Ya veremos.

domingo, 3 de febrero de 2013

Mi lucha con la pubalgia

Prometí no hundirme y en eso estoy. Pese a tener malos momentos, desde el primer día del diagnóstico o incluso antes tenía claro que habría que trabajar y esforzarse. Y seguramente más que para preparar un ultra, sobre todo porque los resultados no van a ser ni rápidos ni evidentes.

El objetivo en el duro encuentro con la osteopatía de pubis es doble. Por un lado conseguir el equilibrio de la zona pélvica, ya que hay una descompensación de aductores, abdominales y demás músculos de la zona (psoas, lumbares, etc.). El otro es curar la inflamación o edema que se ha producido en la membrana ósea, en la sínfisis del pubis, y que al estar en un lugar tan profundo es lo más complicado.

El plan de trabajo que sigo escrupulosamente es el siguiente:

  • Fisioterapia: Lunes, miércoles y viernes. Mi fisio Asun se lo está currando con sesiones que incluyen desde masajes de descarga y estiramiento hasta técnica craneosacral (método Poyet) o acupuntura. Media hora seguida de ultrasonido y aplicación de hielo en la zona. Antes de todo eso también recibo otra media hora de magnetoterapia.
  • Piscina: No era mi intención ni me apetecía demasiado, pero ante la insistencia y consejos de casi todo el mundo he dado el paso. La verdad es que si quería hacer algo de ejercicio para mantener la forma era la única salida. Agradecerles a Antonio por su interés y a Sergio por su ofrecimiento para acudir a sus instalaciones donde voy martes y jueves. Una horita, no mucho, pero en la que aprovecho para hacer algo de cardio "mientras intento flotar".
  • Ejercicios: Hago dos tablas de lo más completas para lograr el buscado "equilibrio pélvico". Los días que no hago piscina empleo la más dura: empiezo con estiramientos y sigo con abdominales, trabajo de aductores y abductores, estabilizadores, glúteos y lumbares, para terminar con más estiramientos. En total una hora con más de 700 repeticiones. Los días de piscina hago otra tabla algo más suave con abdominales isométricos y luego estiramientos por elongación en posturas excéntricas (en otra entrada los explicaré pero suenan bien, ¿verdad?). Se hace pesado pero llevo 15 días en los que no he perdonado ni uno, y prometo seguir así. 
  • Medicación: Antinflamatorios (Celebrex) mañana y tarde después de las comidas, y un relajante muscular al acostarme (Sirdalud). 

La próxima cita con el traumatólogo será a final de mes. ¿Cómo estoy? Bueno, no estoy peor que hace 15 días. Supongo que algo mejor, pero la lesión no es un dolor localizado que puedas sentir y calibrar fácilmente. Sé que me queda camino, pero seguiremos trabajando con todas las fuerzas y lo que tenga que ser será. Lo más duro ahora mismo es la lucha con la cabeza. Estar parado es difícil de asumir, pero hay que ser positivo y relativizar las cosas. Todo pasará antes o después.

Quiero agradeceros a todos, a los más cercanos y a los menos, vuestras muestras de apoyo y comprensión en estos momentos. Todo han sido ánimos y buenos deseos, y eso también te hace ver que merece la pena sentarse a contar otras cosas que no son entrenos y carreras.

miércoles, 23 de enero de 2013

Estoy jodido...pero no hundido

Se han confirmado los peores pronósticos. Lo que el traumatólogo esperaba descartar al final es lo que tengo: osteopatía de pubis. Ha sido un mazazo porque no lo esperaba. Tampoco era normal el tiempo que llevaba parado y con fisioterapia sin mejorar. Ahora que muscularmente estoy más descargado y la lesión "aislada" sí noto el dolor en la zona púbica, en el bajo abdomen, muy profunda.

El resultado de la resonancia me lo dieron el viernes y hasta que hoy me ha visto el médico he tenido tiempo para ir asumiéndolo (más o menos...). También me vio mi fisio el lunes pasado y ya me ha dado su punto de vista y el plan de trabajo para las próximas semanas. Menos sesiones pero más intensas cada dos o tres días  y un fuerte trabajo de estiramientos y abdominales diario. Ya he empezado con ello.

El médico ha relativizado la lesión. Dice que el hueso no está muy afectado. Lo fundamental es tener paciencia y por supuesto descanso deportivo. De correr ni hablar y bici tampoco lo aconseja. En todo caso natación y suave, pero de momento el agua no entra en mis planes así que iré más al gimnasio para hacer tren superior y no perder demasiado la forma. Además continuo con los antinflamatorios y dentro de un mes nueva visita para evaluar los avances.

De plazos no quiero hablar. Por mi parte seguro que va a ser lo mínimo, pero la recuperación ósea es una incógnita y puede suponer de dos meses hasta ocho, nueve, o algunos casos más graves que acaban en quirófano. Mejor ni pensarlo, de hecho estoy seguro que será más rápido de lo que creo, pero también que llevo casi dos meses parado y la situación no ha avanzado casi nada.

De las causas ya hablaré más adelante. Son muchas, algunas complejas, y todavía estoy analizando y sacando conclusiones. Tampoco tengo ganas de justificar nada, la verdad. Los que quieran aprovechar para decir que era lo normal, que mucha tela y que esto no conduce a nada que aprovechen ahora. Desde luego que estas lesiones no aparecen por estar sentado en un sofá viendo la tele. Me ha tocado, y como me ha dicho la fisio, son cosas del deporte y de la suerte de cada uno.

Total, que aunque estoy bastante tocado no voy a morirme de esto. Tengo mucha gente que me apoya, sobre todo mis super piratas, y antes de lo que se crean estaré pegando botes y dando codazos por esos montes junto a ellos.

domingo, 13 de enero de 2013

No termino de arrancar

A finales de año, con la lesión del oblicuo casi superada, comencé a rodar. Fueron salidas muy cortas, de 5 a 8 kms y a ritmos también muy suaves. El 31 también me permití "el lujo" de correr la San Silvestre Jerezana, que por cierto fue todo un éxito, donde pude saludar a muchos amigos corredores. También hice mi particular despedida de mi club de origen, el DBM, corriéndola con su camiseta.

San Silvestre Jerezana rodeado de amigos

Después hice otros dos rodajes donde me exigí algo más, y ahí me di cuenta que la cosa no marchaba bien. En cuanto subí un poco el ritmo, y hablo de 5:15/5:20, las molestias en los abdominales volvieron a aparecer. Como no había terminado con las sesiones de fisioterapia, Asun (la fisio que ha seguido conmigo una vez que Noelia se fue de vacaciones) comprobó que aunque el oblicuo estaba bien seguían habiendo zonas con problemas (recto anterior, por ejemplo) por lo que me recomendó una nueva visita al traumatólogo.

El jueves pasado fui a la consulta, esta vez a un traumatólogo especializado en deportistas de la clínica Beiman donde estoy yendo a la rehabilitación, y el diagnóstico dice que parece ser una pubalgia provocada por una tendinopatía de adductores. Me ha pedido también una resonancia magnética (que me hacen el miércoles) para descartar una poco probable (según él) osteopatía de pubis. Además tengo que tomar unos antinflamatorios bastante fuertes dos veces al día y un relajante muscular por la noche. Además, otras diez sesiones de rehabilitación más centradas en los adductores y por supuesto, reposo deportivo: nada de ejercicio de piernas.

Al parecer tengo los adductores muy tensionados, fruto de la carga de este año y probablemente de la falta de estiramientos o de una buena descarga muscular. También el tipo de ejercicio es clave, ya que subir cuestas ejercita mucho más esos músculos de las piernas. Esto hace que se produzca una descompensación con la zona abdominal provocando esos dolores e incluso la rotura de fibras del oblicuo.

Ya he empezado con esas sesiones con masaje de descarga sobre los adductores dichosos y estoy viendo las estrellas, pero creo que están siendo efectivas.

No voy a extenderme mucho más. Mi estado anímico no es demasiado malo a pesar de todo. La creación de nuestro Club Trail Pirata está ayudando a sobrellevar este periodo que se me está haciendo, ahora sí, realmente largo. Me preocupa la inactividad, el tiempo que sigue pasando sin poder hacer nada y sobre todo no saber hasta cuando seguiré así.

Los planteamientos de este año eran claros y, aunque todavía lejanos, empiezo a temer por ellos por falta de tiempo y preparación. Ni siquiera quiero hablar de ellos, pero los 101 en mayo es lo primero que tengo en mente después de una tortuosa inscripción. En cualquier caso lo primero es recuperarse y después planificar bien la temporada para evitar caer de nuevo en este "bache". Mantendremos la paciencia.